El Consejo de Ministros aprobó este decreto el pasado 24 de junio y entró en vigor tras su publicación en el Boletín Oficial del Estado (BOE), pero, tal y como fija la ley, debía pasar por el Congreso para su ratificación.
Ésta llega precisamente en plena quinta ola del coronavirus, con los contagios en plena escalada y con el incremento de las hospitalizaciones, pese al buen ritmo que lleva el proceso de vacunación en España.
Finalmente, el texto del Ejecutivo consiguió el apoyo de 180 votos, puesto que a los 155 que suman PSOE y Unidas Podemos se adhieron, entre otros, Ciudadanos, Bildu, Más País y Compromís, frente a los 90 votos que lo rechazaron, entre ellos el PP y Foro Asturias, y 78 abstenciones, entre ellas la de Vox, ERC, PNV y Junts.