Ante la polémica suscitada a raíz del apoyo de la sociedad civil en la lucha contra el cáncer, la Asociación Española Contra el Cáncer (AECC) ha salido a la palestra para decir que "cualquier ayuda procedente de la sociedad civil, bien sea a través de donaciones particulares, de empresas o fundaciones, son necesarias para hacer frente a una enfermedad de la que cada año mueren unas 100.000 personas". La Asociación destaca que este tipo de colaboraciones deben de apoyar la sostenibilidad del sistema sanitario público para poder garantizar el acceso universal, la equidad, la excelencia del mismo y la participación ciudadana.
Asimismo, destaca, este tipo de colaboraciones permitirá al sistema sanitario la incorporación de los avances científicos que permitan mejorar la atención a las personas enfermas y su calidad de vida. En todo caso, estas colaboraciones deben estar sujetas a los principios de transparencia y comunicación pública, tanto en el proceso de aplicación de la financiación, como en los resultados para el sistema sanitario y, en especial, en términos de beneficio para el paciente. No hay que olvidar, señalan, que el cáncer le cuesta a las arcas del Estado alrededor de 7.000 millones de euros cada año, lo que supone casi el 11% del gasto sanitario público español y el 0,66% de nuestro PIB, destaca la Asociación.