El cierre perimetral en las comunidades autónomas no está siendo, ni mucho menos, sinónimo de lugares vacíos en casi ningún rincón de España. Las ganas de salir y disfrutar del tiempo libre, aunque con límites territoriales, es cada día más visible.
En Valencia, el sol ha sido el mejor aliado de las playas totalmente llenas. En Barcelona no hay ni un sitio libre en las terrazas ni en la playa. Multitudes bajo una estrecha vigilancia policial, lo que muchos agradecen.
La Guardia Civil denunció este Jueves Santo un total de 1.166 infracciones y controló 32.271 vehículos en toda España, según han indicado a Efe fuentes cercanas del dispositivo.
Este dispositivo forma parte del despliegue de 64.200 agentes de la Policía Nacional y de la Guardia Civil que en esta Semana Santa tienen como objetivo que se cumplan las restricciones, como no saltarse el cierre perimetral decretado en todas las comunidades autónomas.
Estos controles afectan especialmente a las carreteras y, según informó recientemente el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, se intensifican en los recorridos cortos.
Por segundo año consecutivo, la pandemia de la covid-19 ha dejado en sus viviendas a los españoles en Semana Santa, y además en el periodo vacacional donde tradicionalmente se produce el mayor éxodo de conductores.