Obama condiciona los pasos hacia Cuba y señala el deber de Venezuela en el tema nuclear

AGENCIA EFE 20/10/2010 00:00

En una entrevista con varios medios en español, entre ellos Efe, el mandatario estadounidense pasó revista a las elecciones legislativas en EE.UU., que tendrán lugar el 2 de noviembre, y al impacto que pueden tener en una posible reforma migratoria y en la política de Washington hacia América Latina.

Así, aseguró que tras las elecciones legislativas del 2 de noviembre continuará "avanzando para expandir" los "lazos con América Latina" en la segunda mitad de su mandato.

Pase lo que pase en los comicios de noviembre, en los que se anticipan ganancias para los republicanos, "con respecto a América Latina debería haber un firme consenso" entre la Casa Blanca y el Congreso, indicó el gobernante.

"Espero conseguir apoyo de los dos partidos para expandir los lazos comerciales, la cooperación comercial", mencionó, entre otros ejemplos.

El presidente estadounidense también puso de relieve el interés republicano en la cooperación en la lucha contra el narcotráfico en países como México, Colombia o la cuenca del Caribe.

"Creo que continuaremos avanzando en colaboración con ambos partidos para expandir los lazos entre EE.UU. y América Latina", subrayó Obama, quien a su llegada al poder anunció "un nuevo comienzo" en las relaciones con el resto del continente, sobre una base de "igualdad".

En este sentido, expresó su satisfacción por los "éxitos económicos" de países como Brasil o Chile, así como su presencia cada vez mayor en los foros internacionales.

El mandatario se refirió también a países concretos, como Venezuela, que recientemente firmó un acuerdo de cooperación con Rusia para construir una central nuclear en territorio venezolano, algo que el Departamento de Estado de EE.UU. ha señalado que vigilará "muy atentamente".

Venezuela "tiene el derecho a contar con energía nuclear pacífica, pero también tiene la obligación de asegurarse de que esos sistemas no se emplean con fines armamentísticos".

Este, aseguró Obama, es "el estándar que utilizamos con todo el mundo y esperamos que ellos respeten ese estándar", subrayó.

En sus declaraciones, el gobernante estadounidense reiteró su interés en mantener "una relación mejorada con Venezuela".

Al mismo tiempo, subrayó: "Queremos que los venezolanos tengan una voz dentro de su propio Gobierno. No es algo que podamos imponer de manera externa, pero seguiremos alentando la libertad de expresión, la libertad de prensa, la libertad de partidos políticos".

Con respecto a Cuba, Obama condicionó la adopción de nuevos pasos de acercamiento hacia Cuba a que el régimen de ese país demuestre que es "serio" y tome medidas para aumentar la "libertad".

En la entrevista con los medios hispanos, el presidente estadounidense opinó que la reciente liberación de presos políticos es "algo positivo", pero aún no se han " visto todos los resultados completos de esas promesas".

Tras recordar que ya el año pasado liberalizó los viajes de cubanoestadounidenses a la isla, insistió: "Antes de dar nuevos pasos queremos asegurarnos de que el régimen castrista es serio y la piedra de toque para eso será la libertad", dijo, pronunciando la última palabra en español.

Acerca de la reforma migratoria prometió hoy que continuará su presión tras las elecciones de noviembre y expresó su esperanza de contar para entonces con el apoyo de algunos legisladores republicanos, que hasta ahora se han imposibilitado la aprobación de esta promesa electoral de Obama.

"Puede ser que después de las elecciones alguna gente preocupada por verse atacada desde la derecha durante sus primarias, o durante las elecciones, digan que en realidad esto es lo correcto", apuntó el mandatario.

Por lo tanto, señaló, "es importante no dar por hecho que no podremos conseguir una reforma migratoria integral".

Finalmente, el presidente estadounidense no quiso valorar si el nuevo Congreso facilitará la aprobación del Tratado de Libre Comercio (TLC) con Colombia, aunque indicó acerca de ese acuerdo, pendiente de aprobación en el Capitolio, que sigue "creyendo que es algo que merece la pena".