Las autoridades militares, según el diario "Nueva Luz de Myanmar", identificaron a los detenidos como guerrilleros del Frente Democrático de Todos los Estudiantes y del grupo armado de la etnia karen, el mayor de los que combaten contra las tropas gubernamentales.
El citado medio oficial informó de que los "insurgentes" disponían de explosivos y detonadores para hacer bombas que planeaban colocar en Naypyitaw, la nueva capital, y las principales ciudades de Rangún y Mandalay.
Dos de los cinco sospechosos han sido acusados por las autoridades de la autoría de la bomba que estalló el 1 de octubre en una oficina gubernamental en la población de Bago, a 80 kilómetros al norte de Rangún.
"Insurgentes y esbirros de otras naciones están detrás de actos terroristas en el país con la intención de socavar la paz y la estabilidad del Estado y alterar las elecciones", afirmó el citado rotativo.
Birmania celebrará el 7 de noviembre las primeras elecciones parlamentarias en dos décadas, pese al boicot del movimiento democrático que encabeza la premio Nobel de la paz Aung San Suu Kyi y las minorías étnicas, salvo excepciones.