Los reyes Felipe VI y Letizia ya han aterrizado en Roma con motivo de su visita de Estado a Italia, que servirá para poner de manifiesto la relación bilateral que existe entre las dos naciones.
Sus Majestades han llegado acompañados del ministro de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación, José Manuel Albares, en una estancia que se prolongará hasta el jueves por la tarde en Nápoles, donde Felipe recibirá su primer doctorado 'honoris causa', por la Universidad Federico II.
Así, los monarcas responden al viaje de Estado que el presidente italiano, Sergio Mattarella, realizó en noviembre de 2021 y que se produce diez años después de la primera visita que hicieron en 2014 tras su ascenso al trono, cuando fueron invitados por el entonces presidente de la República, Giorgio Napolitano.
Los reyes mantendrán encuentros oficiales con Mattarella y con la presidenta del Consejo de Ministros, Giorgia Meloni, y tienen una ruta estrictamente planificada para ello.
La visita arrancará en la tarde de este martes con una reunión en la Real Academia de España en la capital del país con la Asociación de Hispanistas italianos con motivo de su 50 aniversario.
Tras ello, tendrá lugar en la residencia del embajador en Roma, Miguel Ángel Palacios, la tradicional recepción a la colectividad española. Para la ocasión, han sido invitados unos 500 españoles residentes en el país, a quienes el soberano les dedicará unas palabras.
Ya el miércoles arrancará la parte más institucional de la agenda del viaje, en el que Felipe y Letizia, junto a Albares, serán recibidos oficialmente por Mattarella, acompañado por su hija Laura, en el Palacio del Quirinal. Después, los reyes se trasladarán al Altar de la Patria, en la Plaza Venecia, donde realizarán una ofrenda floral en la tumba del soldado desconocido.
El viaje continuará con el almuerzo en su honor ofrecido por Meloni en el Casino del Bel Respiro, y acto seguido se desplazarán a la sede del Senado, en el Palacio Madama, donde Don Felipe y Doña Letizia podrán contemplar unos frisos recuperados de los archivos que muestran la coronación de Carlos V. La siguiente parada será el Palacio de Montecitorio, sede de la Cámara de Diputados y donde se realizará una sesión conjunta.
El rey, ya en solitario, visitará el Ayuntamiento de Roma para reunirse con su alcalde, Roberto Gualtieri, con quien tendrá ocasión de hablar entre otras cosas del Año Jubilar 2025. La jornada del día se completará con la cena de gala que Mattarella ofrecerá a los reyes en el Quirinal. Una gala sencilla, discreta y austera y que nada tiene que ver con los banquetes de monarquías como la británica o la sueca.
El jueves, último día del viaje, Felipe VI desayunará con empresarios italianos y españoles, mientras la reina, en su único acto en solitario, aprovechará para reunirse en la residencia del embajador español en Roma con personal español que trabaja en la Organización para la Alimentación y la Agricultura (FAO). Cabe recordar que Letizia es embajadora especial para la nutrición de esta agencia de la ONU.
Ya juntos, los reyes abandonarán Roma y se desplazarán a Nápoles, donde Mattarella ofrecerá un almuerzo en su honor en Villa Rosebery, una antigua residencia real y una de las tres residencias oficiales del presidente de la República.
La visita se cerrará con la ceremonia de investidura como doctor honoris causa en ciencias sociales y estadística del rey por parte de la Universidad Federico II de Nápoles. El acto se celebrará en el emblemático Teatro San Carlos, el teatro de ópera más antiguo del mundo. Esta será la primera ocasión en que Felipe VI sea investido doctor honoris causa. Será entonces donde el monarca pronuncie sus últimas palabras antes de regresar a España.
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