El Gobierno pierde un escaño en el Congreso y Ábalos se sienta en una silla en el Grupo Mixto

La coalición de Gobierno pierde otro diputado en el Congreso tras la salida de Ábalos al Grupo Mixto por la investigación a su exhombre de confianza Koldo García. Si ya la situación para aprobar cualquier ley era con un estrecho margen ahora el Ejecutivo compuesto por PSOE y Sumar lo tendrán más complicado.

El Gobierno nació con 153 diputados, a 23 de la mayoría absoluta, los que tenían el PSOE y Sumar tras las elecciones. Ya la situación era difícil y tenían que sudar para alcanzar mayorías. ¿Y qué ha pasado desde entonces? Primero Podemos se fue al Grupo Mixto y la coalición se quedó en 149.

Ahora se va José Luis Ábalos a la bancada del Grupo Mixto y el Gobierno se queda con 148 diputados. La pregunta es... ¿Tendrá que negociar también las votaciones con Ábalos? El exministro de Transporte se queda, a título individual, acompañado de estos partidos en el Grupo Mixto. Esta misma tarde, se despejarán dos incógnitas. ¿Dónde se va a sentar Ábalos? Y además le toca su primera votación tras su divorcio con el PSOE.

Por el momento su escaño ha sido retirado y el exministro se sentará en una de las sillas habilitadas en la zona, donde se sienta el Grupo Mixto. Desde ahí Ábalos podrá votar.

En el Grupo Mixto Ábalos mantiene sus ventajas como diputado

José Luis Ábalos se incorpora a un puesto en el Grupo Mixto, con todos los privilegios de diputado y rodeado de señorías: cuatro de Podemos, una diputada de Coalición Canaria y otro del Bloque Nacionalista Gallego, que no le ha gustado mucho la llegada del diputado socialista.

El portavoz del BNG en el Congreso, Néstor Rego, ha sido claro: "en el Grupo Mixto ya estamos al completo", dijo a los medios, antes de que se supiera la decisión del exministro socialista José Luis Ábalos no entregue su acta de diputado y se integre en ese grupo parlamentario.

Rego le pidió a Ábalos asumir sus "responsabilidades políticas" en el caso en el que está investigado su exasesor Koldo García, por el supuesto cobro de comisiones ilegales por contratos en la compra de mascarillas durante la pandemia, aun reconociendo que de momento no existan responsabilidades judiciales.

"Si su propio partido se lo pide, lo normal es que deje su escaño, lo contrario no sería una buena actuación política" el diputado gallego.

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