El día jueves 17 de agosto marca un hito en el calendario de la Casa Real Española. La princesa Leonor, de 17 años, empieza hoy jueves su carrera en el Ejército de Tierra al entrar a la Academia General Militar de Zaragoza. Este paso supone un cambio importante en su vida después de terminar sus estudios de bachillerato en Gales. Sin embargo, tendrá que acatar fielmente las severas reglas que rigen la formación militar, sin gozar de privilegios especiales.
Durante este año, la hija del rey Felipe VI se formará en las Fuerzas Armadas españolas, con un énfasis principal en el Ejército de Tierra. Después de esta fase, la hija de la reina Letizia seguirá su educación militar, pero esta vez para el Ejército de Mar, integrándose en la Escuela Naval de Marín en Pontevedra, y posteriormente para el Ejército del Aire en la Academia General del Aire y el Espacio de San Javier, situada en la provincia de Murcia.
Una vez ingrese a la Academia y se despida de sus familiares, a la princesa y otros cadetes se les entregará un dossier que detalla todas las normas a seguir durante su estancia en las instalaciones militares. Se ha confirmado que la hermana mayor de la infanta Sofía, de 16 años, no tendrá trato privilegiado, salvo en situaciones excepcionales relacionadas con compromisos oficiales dentro de la agenda real.
Leonor recibirá tres uniformes que serán su vestimenta estándar. En cuanto a su peinado, hay reglas estrictas que deberá cumplir rigurosamente. El código interno del Ejército ofrece cierta flexibilidad en cuanto a la longitud del cabello, pero es más estricto en relación al color. Los miembros deben conservar su color de cabello natural y evitar cualquier tinte que resulte en un color distinto al original de cada individuo.
La larga melena que suele llevar la princesa de Asturias deberá estar recogida en su mayoría, y en las formaciones más importantes, deberá llevar un moño obligatorio. Además, podrá utilizar una redecilla o horquillas para el cabello, siempre y cuando sean del mismo color que su pelo para no alterar su apariencia. Se permite una excepción para actividades deportivas, durante las cuales podrá llevar una coleta o trenza. Sin embargo, el uso de diademas y pasadores está estrictamente prohibido por el Ejército de Tierra.
Algunas de estas normas sobre el peinado no serán nuevas para la princesa Leonor, ya que desde su infancia ha sido educada siguiendo patrones similares. En cuanto a la manicura, las normas son precisas: no se permiten uñas pintadas, el esmalte debe ser transparente. Hasta este verano, la princesa de Asturias no había utilizado colores en sus uñas, por lo que le resultará fácil cumplir con esta norma.
En lo que respecta al maquillaje, también hay pautas claras. Si bien se permite su uso, hay restricciones. Los colores deben ser naturales y no deben contrastar demasiado con el tono de piel de la persona que los lleva. Asimismo, tanto las sombras de ojos como el lápiz labial o de ojos deben ser de tonos suaves.
En cuanto a los pendientes, las mujeres en el Ejército tienen permitido llevar uno en cada lóbulo, evitando piercings en otras partes de la oreja. Los pendientes deben ser iguales, preferiblemente de tamaño esférico y en color dorado o plateado, sin ser excesivamente grandes para no sobresalir del lóbulo de la oreja ni llamar demasiado la atención.
Por último, Leonor deberá respetar las normas en cuanto a accesorios. Joyas y complementos están estrictamente prohibidos en la Academia para no interferir en las actividades diarias. No obstante, se permite el uso de un reloj e incluso de dos anillos, siempre que sean de compromiso. Sin embargo, los collares y pulseras están prohibidos, a excepción de pulseras pequeñas que no sean excesivamente llamativas en la muñeca.