Hasta el último momento. Junts, el partido que lidera el expresident de la Generalitat y prófugo de la Justicia, Carles Puigdemont, ha impuesto su particular ferragosto en el Congreso; hasta el mismo jueves que se constituye la cámara y se elige los componentes de la mesa del Congreso- cuatro vicepresidentes y cuatro secretarios- y a la presidencia de la institución, no decidirán el sentido de su voto, salvo que obre el milagro. Junts ha convocado de manera telemática a su Ejecutiva este jueves 17 entre las 08:00h y las 09:45h, justo 15 minutos después está previsto que se inicie en el Congreso lo los Diputados su primera sesión.
Esta reunión ha sido convocada de mutuo acuerdo con la presidenta del partido, Laura Borràs; la líder en el Congreso, Míriam Nogueras, y el portavoz en el Senado, Jaume Cleries. Este último movimiento de la formación nacionalista anticipa la voluntad del partido de dar la batalla hasta el último suspiro y de paso jugar con los nervios de los socialistas que necesitan los votos de Junts para evitar que el PP se haga con la presidencia del Congreso, la tercera autoridad del Estado. Los populares tienen garantizados 172 "sies" -los 137 suyos, 33 de Vox, 1 de Coalición Canaria y 1 de UPN- mientras que el bloque progresista están en los 171 -PSOE 121, Sumar 31, ERC 7, EH- Bildu 6, PNV 5 y BNG 1-. Solo los 6 de Junts pueden hacer cambiar las tornas.
El "cortejo" a los de Puigdemont ha recaído desde el primer momento en Sumar que reclama discreción y paciencia y que ha confirmado en las últimas horas que está en ello; en alcanzar un acuerdo para que la presidencia recaiga en un candidato "progresista". A ese recetario se ha acogido también Carles Puigdemont que en las últimas horas ha reclamado "paciencia, perseverancia y perspectiva". El mismo partido que el día después de las elecciones retaba a Pedro Sánchez a hacer una propuesta sobre "amnistía" y "referéndum" para negociar una investidura pide ahora...paciencia.
El PSOE tiene dos días para seguir negociando unos apoyos que le garanticen hacerse con el control de la mesa del Congreso que garantiza entre otras cosas tener el control parlamentario y el ritmo legislativo. Los socialistas han recibido la confirmación de que EH-Bildu no va a poner "líneas rojas" en esta negociación. Mertxe Aizpurua, portavoz de EH- Bildu en el Congreso ha garantizado que su formación está por garantizar una "opción progresista". A cambio de esos apoyos los abertzales , que tenían pendiente un encuentro con el PSOE este mismo lunes, hablaban de condiciones "muy razonables y fáciles de cumplir" sin la exigencia de estar en la mesa.
Apoyo sí, otra cosa es que Bildu quiera ser mera comparsa en la negociación. La portavoz de la formación ha enviado un recado a Junts; le ha recordado que cada escaño "es decisivo. ".Aizpurua ha querido dejar claro que la suma de los soberanistas de izquierdas (ERC, Bildu y BNG) es de 14 diputados, más que Junts y PNV juntos (12): "Todos somos necesarios y determinantes".
Ni los socios parlamentarios del PSOE, ni Sumar, están por la labor de que la presidencia del Congreso pudiera recaer en el PNV, una posibilidad que avanzaba Coalición Canaria y que ha sido contestada con un rotundo "no" por parte de la ministra de Economía Nadia Calviño, la portavoz de Sumar en el Congreso, Marta Lois, o la portavoz de Bildu que ha desdeñado la posibilidad con un elocuente "no está encima de la mesa ni como posibilidad".
La opción tampoco está contemplada por los populares que sigue reclamando su intención de obtener la presidencia. El coordinador del PP, Elías Bendodo que ha asegurado que cada partido tienes sus planes. "Entiendo que en estos tiempos actuales, donde hay muchas quinielas para constituir las cámaras, cada uno es libre de proponer lo que quiera y somos absolutamente respetuosos, pero, evidentemente, el Partido Popular tiene sus planes", ha dicho.