Aunque es de Talavera de la Reina, en Toledo, hasta ahora Carlos García Adanero siempre había estado vinculado a la política navarra, llegando a ser secretario general de UPN entre 2007 y 2013. En la última legislatura, fue uno de los dos diputados de la formación foralista en el Congreso, y su intención para la nueva legislatura es volver a tener un escaño, aunque de la mano del PP. En las elecciones del 23 de julio se quedó cerca, tras ser incluido en la listas del Partido Popular por Madrid, donde ocupó el puesto número 16. Los populares consiguieron 15 escaños y se quedaron a 1.749 votos del diputado 16, queahora aspiran a arrancárselo al PSOE con el voto en el exterior..
Teniendo en cuenta que en el voto CERA de las autonómicas del 28M, hubo 4.000 votos más para el PP que para el PSOE, García Adanero y su nuevo partido confían en hacerse con ese escaño que, además, movería el juego de mayorías en el Congreso. Si lo consiguen, y no hay ningún otro cambio que favorezca al PSOE o Sumar, en detrimento de los partidos de la derecha, el bloque de la izquierda se quedaría con 171 escaños frente a los 172 que conseguiría el de la derecha, es decir, lo inverso a las cifras de ahora. Eso impediría que Sánchez llegara al Gobierno con la abstención de los diputados de Junts y le obligaría a conseguir síes de los catalanistas en una sesión de investidura.
El que quiere García Adanero no es el único escaño en disputa, pero todos los ojos están puestos ahí, porque sí es uno de los que más posibilidades tiene de cambiar de manos, con un voto exterior que por regla general tiene a beneficiar a los partidos de Izquierda, aunque no fuera el caso de Madrid en las autonómicas. En cualquier caso, habrá que ver cuál es la participación, si se mantiene la tendencia de voto conservador, y si con el aumento de escaños, las cuentas convierten al tránsfuga en diputado otra vez, o si el escaño se queda en manos del PSOE. No se trata de sacar 1.790 votos de diferencia, porque al haber más votos para distintos partidos, las cuentas cambian y hablamos de más diputados.
El abogado Carlos García Adanero es conocido, pero no tanto por sus políticas, como por el episodio de desacato a la disciplina de partido que protagonizó durante la aprobación de la reforma laboral junto a su compañero Sergio Sayas. Los dos desobedecieron las instrucciones de su formación de apoyar la reforma laboral del Partido Socialista y se sumaron al "no" del PP, su tradicional socio.
La noche anterior a la votación, en febrero de 2022, el PSOE y UPN llegaron a un acuerdo in extremis para apoyar la reforma laboral. El Gobierno respiró tranquilo y pensó que la votación estaba ganada gracias a esos dos votos. Pero, al llegar el momento, los dos diputados navarros decidieron desmarcarse de ese acuerdo y apretar el botón de rechazo a la reforma laboral.
En una sesión alocada, la reforma laboral acabó, pero eso fue así porque el diputado del PP Alberto Casero apoyó la reforma por error permitiendo su aprobación sin quererlo.
A partir de ahí se abrió un proceso que acabó con Adanero y Sayas suspendidos de militancia temporalmente de la militancia de UPNE. Cuando se acercaron las municipales y autonómicas del 28 de mayo, se integraron en las listas del PP. De hecho, ahora mismo Adanero es el portavoz el PP en el Ayuntamiento de Pamplona y aspirante a diputado. En cuanto a Sayas, que encabezó la lista de los populares por Navarra para el Congreso, ha conseguido mantener su escaño.
Nueve son las provincias donde algún partido se quedó a menos de 2.000 votos, pero no en todas tiene por qué haber un cambio ni en todas sería significativo para el juego de mayorías, porque algunos trasvases podrían ser entre el mismo bloque. Ese es el caso de Cantabria, donde el PP está cerca de un escaño más, pero a costa de Vox, con lo que no habría una alteración entre los bloques.
En el caso de Girona, es donde los populares se quedaron más cerca de hacerse con el último diputado, con 359 votos. De inclinarse la balanza en favor del PP, el escaño se lo arrebataría a Junts, pero lo cierto es que el voto CERA en Girona tiene tendencia nacionalista.
En Salamanca, es el PSOE el que aspira a arrebatar un diputado al PP. La distancia a la que se quedaron los socialistas fue de 938 votos. Fuentes del PSOE aseguran que el cambio es posible.
Así las cosas, si PP el PP le arrebata uno al PSOE y viceversa, todo quedaría igual, a la espera de las impugnaciones y recursos que presenten los partidos antes de los resultados oficiales y definitivos que se comunicarán el 8 de agosto.
2,3 millones de españoles están inscritos en el Censo de Electores Residentes Ausentes, voto CERA. Estas elecciones generales son las primeras en las que se utiliza, tras la reforma que puso punto final voto rogado.
Hasta finales de 2022, los residentes en el exterior tenían que solicitar el voto, con lo que el proceso se complicaba. Tras ese cambio, todos los electores reciben la documentación para votar, con lo que el proceso se simplifica, y eso supone un aumento de la participación, por lo que se trata de unos sufragios más relevantes que nunca.