La rotunda victoria de la derecha en las municipales augura un cambio de ciclo en las próximas elecciones generales
El PP supera al PSOE en más de 700.000 votos y controlará 30 capitales de provincia, más del doble de las que ganó en 2019
El PSOE pierde más de 400.000 votos, resiste en el 28%, pero las formaciones a su izquierda sufren un batacazo
Excepto en 1979 y 2007, el vencedor de las elecciones muncipales se ha convertido posteriormente en la primera fuerza en las elecciones generales
De nuevo en España unas elecciones locales apuntan a un próximo vuelco electoral. El Partido Popular ha ganado las elecciones municipales. Sube cerca de dos millones de votos hasta colocarse por encima de los siete millones. El PP supera al PSOE en 7,5 millones de votos en unas elecciones que han transcendido el ámbito municipal y se han convertido en un plebiscito sobre el presidente socialista Pedro Sánchez y sus alianzas parlamentarias. Si hace cuatro años el PSOE le sacó 7 puntos porcentuales al PP, ahora el PP le supera casi por cuatro puntos. El resultado es un mal augurio para los socialistas y el conjunto de la izquierda porque desde el comienzo de la democracia las elecciones municipales se han convertido en un buen elemento predictor de las generales, en especial si se celebran solo meses después, como ocurre este año.
Cuando ha pasado poco más de un año desde su llegada al liderazgo del PP tras una traumática crisis interna, la primera cita electoral nacional confirman las buenas perspectivas que acompañan a Alberto Núñez Feijóo de cara a las próximas elecciones generales. "España ha iniciado un nuevo ciclo político", ha dicho el líder del PP desde el balcón de su sede de la calle Génova. En ese ciclo, el líder del PP tiene ahora cómo reto definir su relación municipal y autonómica con Vox. Si en 2019, el bloque de la derecha (PP, Ciudadanos y Vox) obtuvo 8 millones de votos, ahora sube hasta los 9 millones.
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El PSOE pierde más de 400.000 votos y se queda en el 28%, el mismo procentaje que obtuvo en las últimas generales y un punto por debajo de las últimas municipales, pero es un resultado insuficiente para hacer frente a la gran subida del PP y la irrupción municipal de Vox. Sobre todo cuando sus socios a la izquierda se hunden y son incapaces de traducir en concejales muchos de sus votos. El PP de Núñez Feijóo reabsorbe la mayor parte del voto que se llevó Ciudadanos hace cuatro años, un partido en continua agonía que prácticamente desaparece del mapa municipal. Y Vox entra con fuerza en los municipios, donde en 2019 tuvo una escasa representación, al duplicar sus votos y pasar del 3% a más del 7%.
La derecha duplica sus capitales de provincia
Cuando el 17 de junio se constituyan los ayuntamientos, el bloque de la derecha podrá arrebatar numerosas capitales de provincia al PSOE. Mientras en 2019, el PP ganó las elecciones en 13 de las 50 capitales de provincia, ahora triunfa en 29 y podrá gobernar en más de una treintena. A las que hay que sumar las victorias del PP en las ciudades autónomas de Ceuta y Melilla, donde el proceso electoral se ha desarrollado sin incidentes pese a la polémica que ha rodeado el voto por correo en los días previos a la votación. Incluso si Vox no apoya al PP, los de Núñez Feijóo conseguirán hacerse con las alcaldías porque el sistema de elección minicipal facilita que el candidato de la lista más votada se convierta en el regidor municipal si no hay otro con una mayoría alternativa que le supere.
Andalucía, fin del granero socialista
Los socialistas deberán tomar nota de lo ocurrido en Andalucía. En esta comunidad, el PP vence por 200.000 votos y cinco puntos a un PSOE a la baja, cuando hace cuatro años los socialistas ganaron por cera de 10 puntos. La derecha recupera la emblemática Sevilla. El PP gana, sube 6 escaños, y Vox sube 1. La capital andaluza era una de las grandes batallas municipales de estas elecciones, el objetivo que el PSOE luchaba por conservar. La pérdida de Sevilla, la victoria del PP en las ocho capitales de provincia -excepto en Jaén- y en grandes municipios andaluces es un signo ominoso para el PSOE en las próximas generales. Con estos resultados y después de el gran triunfo del PP en las autonómicas del año pasado, Andalucía parece haber perdido su condición de granero de voto socialista.
Madrid, la derecha arrasa
El popular Martínez Almeida alcanza la mayoría absoluta en el Ayuntamiento de Madrid y Unidas Podemos y Ciudadanos quedan fuera. Más Madrid, que ganó pero no gobernó hace cuatro años, pierde 7 concejales y al PSOE le sirve de poco consuelo una mejora en 3 ediles respecto a 2019. Unidas Podemos desaparece de Madrid. Salvo el interludio que supuso el mandato de Manuela Carmena, la izquierda sigue sin levantar cabeza en la capital que además es la ciudad más poblada y económicamente más potente de España.
La izquierda derrotada de Valencia a Valladolid
El PP con Maria José Catalá recupera la alcaldía de Valencia en detrimento del actual alcalde, Joan Ribo de Compromis, que pierde un concejal y cerca de 15.000 votos respecto a 2019. También cae otra alcaldía muy significativa del PSOE, la de Óscar Puente en Valladolid. Gana las elecciones, pero PP y Vox suman para una mayoría alternativa. En Zaragoza donde el PP no ganó hace cuatro años, pero consiguió gobernar, ahora arrasa y prácticamente duplica sus concejales.
Los populares también han duplicado de largo el número de capitales de provincia que podrán gobernar. Vigo no es capital de provincia pero sí una de las mayores ciudades de Galicia y donde el socialista Abel Caballero ha reeditado su tercera mayoría absoluta dejándose sólo un escaño respeto a 2019. A expensas de lo que ocurra en Barcelona, esta ciudad gallega puede convertirse en el mayor municipio que conserve el PSOE junto a Las Palmas de Gran Canaria donde la exministra Carolina Darias ha ganado las elecciones y aspira a convertirse en la próxima alcaldesa.
Trias gana en Barcelona y los socialistas en el resto de capitales
En Barcelona, Xavier Trias, que se ha presentado como un candidato más propio de la vieja Convergencia que de Junts, gana las elecciones, pero no está claro que vaya a gobernar. La actual alcaldesa, Ada Colau, queda en tercera posición por detrás de los socialistas. El PP sube 2 concejales y Vox entra con 2 de manera que los concejales de la derecha española suman de manera insólita más que los de ERC, el partido que ganó pero no pudo gobernar hace cuatro años. En Badalona, el popular Xavier García Albiol obtiene mayoría absoluta y podrá evitar lo que ocurrió en 2019, cuando ganó pero una mayoría alternativa le arrebató la alcaldía. No obstante, Cataluña ha sido el territorio más propicio para los socialistas. El PSC gana en Girona, Tarragona y Lleida y arrebata a ERC el título de fuerza más votada.
Bildu avanza en el duelo vasco
En el particular duelo que mantiene el nacionalismo vasco, el PNV vuelve a ganar las elecciones muncipales y forales en toda la comunidad, pero sufre un intenso desgaste frente al ascenso de Bildu. El PNV deja de ser el partido más votado en Guipúzcoa y Vitoria, donde Bildu es la fuerza más votada. Cuando falta un año para las autonómicas, la izquierda abertzale avanza como alternativa.
Las muncipales como pronóstico de las generales
Pese a que en las elecciones locales participan menos electores, concurren otras muchas fuerzas que son irrelevantes en las generales y el perfil de los candidatos a menudo pesa más que las siglas de los paridos, estos comicios suelen anticipar el resultado de las elecciones generales.
Las elecciones locales han anticipado a menudo los cambios de ciclo entre derecha e izquierda en España. Salvo en 1979 y 2007, la victoria en las elecciones municipales ha sido siempre un preludio de la victoria en las generales. Más aún cuando más cerca se celebra una de otra, como ocurre este año. La primera victoria del PP en unas generales en 1996 vino anticipada de su victoria en las municipales de 1995. En 2011, el PP le sacó 10 puntos a los socialistas en las muncipales de mayo que luego se convirtieron en 16 en las generales de noviembre.
En mayo de 2019, el PSOE venció en las municipales de mayo con un 29% de los votos y en noviembre obtuvo un 28% en las generales. El PP tuvo un 22% en las municipales y un 21% en las generales. Y en el total de votos socialistas y populares casi calcaron los resultados en ambas citas electorales: 6,6 millones de votos el PSOE en los municipios y 6,7 millones en las generales; 5 millones el PP en las municipales y 5 en las generales.