Compromís acusa el efecto del caso Oltra y pierde tres diputados en el Parlament de la Comunidad Valenciana. Tras obtener un 12% de los votos en la Comunidad Valenciana, el partido de Joan Bandoví dejará de ser decisivo para la formación de Gobierno en la comunidad autónoma, lo que supone además de un cambio de signo político en la Generalitat, que quedará en manos del PP, y la entrada de Vox en el Ejecutivo valenciano al no alcanzar los populares la mayoría absoluta. La aritmética política ha dado la espalda a Compromís, en una campaña electoral que se ha vivido además como una reválida para la formación naranja, después de que su cabeza visible desde las pasadas elecciones, Mónica Oltra, abandonase el cargo en verano de 2022 tras ser imputada por el Tribunal Superior de Justicia de la Comunidad Valenciana.
Ahora, las urnas han castigado a Compromís con una importante reducción de votos. El partido no ha logrado mantener la cuota de 17 diputados que le otorgaron las elecciones de 2019, con lo que seguiría siendo necesario para formar un Gobierno de izquierdas que provocase una reedición del llamado Pacte del Botànic entre la coalición progresista de Més, Iniciativa y VerdsEquo junto al PSOE. La salida de este binomio puede provocado para Compromís una importante reducción de su cota de poder, además de una pérdida de evidente de estructura de partido, al ver reducidas también sus fuentes de financiación públicas ante una posible merma en su número de representantes y cargos de confianza.
De hecho, la campaña de Compromís ha tenido números que hacían prever nubarrones, con encuestas que daban a la formación un resultado en estas elecciones por debajo incluso de los 14 escaños, lo que hacía depender a la formación de la capacidad de retener el voto de izquierdas que tuvieran tanto el PSOE como Podemos en la Comunidad Valenciana para matener su posición necesaria a la hora de un gobierno en el bloque de izquierdas. Sin embargo, la formación morada ha sufrido también un varapalo electoral, al no conseguir siquiera representación en la cámara autonómica, en la que ocupaba con anterioridad ocho diputados.
En cualquier caso, los resultados electorales son también un examen para una de las figuras claves del partido, el valenciano Joan Baldoví, nacido en Sueca en 1958 y que se ha curtido durante 13 años en los pasillos y la tribuna del Congreso de los Diputados. Baldoví tuvo que sustituir a su compañera y máxima responsable del partido, Mónica Oltra, que se presentó a las dos últimas elecciones autonómicas y alcanzó la vicepresidencia en los últimos comicios. Bajo el lema “Por todo lo que importa”, Compromís ha centrado su campaña en un pilar de 1.100 medidas repartidas por distintos bloques pero con un denominador común: la búsqueda de un método de financiación más “justo” entre la Administración central y la autonómica. Sin embargo, la propuesta no ha dado los resultados esperados.
Durante la campaña, la formación protagonizó también una polémica cuando acusó a Adif, el gestor de infraestructuras ferroviarias español, gestionado por cargos nombrados de forma mayoritaria por el Gobierno central, de censurar su mensaje tras retirar una pancarta publicitaria que el partido había instalado durante la campaña en el vestíbulo de la Estación del Norte de Valencia, que según la formación fue retirada “de forma unilateral”.