La situación económica ha monopolizado una vez más la sesión de control al Gobierno. Sánchez ha vuelto al Congreso superado el COVID y con sus últimos Presupuestos debajo del brazo recién aprobados por el Consejo de Ministros. Como era previsible le esperaba un PP al ataque que le ha acusado de ser un "mal gobernante incapaz de resolver nada". La número dos del Partido Popular, Cuca Gamarra, ha cargado duramente contra el presidente del Gobierno acusándole de "distraer con los ricos", en referencia al impuesto a las grandes fortunas, mientras "se dedica a desplumar a los trabajadores" y a "comprar voluntades".
Sánchez ha presumido de Presupuestos y ha respondido a Feijóo que este martes calificó las cuentas públicas como "antisociales". El jefe del Ejecutivo ha comparado sus números con el último PGE del PP de 2018 para señalar que tienen un aumento de, 35,4% en gasto social. Concretamente, en Educación un 62% , en becas un 60% y en Dependencia un 151%.
"Estos son unos Presupuestos sociales, que protegen a la clase media y trabajadora", ha enfatizado el presidente que ha contrapuesto sus números con los Gobiernos del PP donde subió la desigualdad y la pobreza. Ha recordado además a Gamarra que el Ejecutivo ha movilizado ya 35 mil millones de euros para hacer frente al impacto de la guerra en Ucrania y ninguna medida ha contado con el apoyo del principal partido de la oposición.
Ha incidido además en el mensaje de que el PP está al servicio de los poderosos como viene repitiendo desde el debate en el Senado donde se enfrentó a Alberto Núñez Feijóo. Según Sánchez el Gobierno pondrá todos los recursos del Estado al servicio de la mayoría social y no de la "minoría pudiente" que es lo que hicieron cuando gobernaron los populares.
Previamente Gamarra le había preguntado qué sacrificios estaba dispuesto a hacer el Gobierno después de perder el "sentido de la realidad" al negarse a ajustar el IRPF para las rentas medias y bajas, bajar el IVA de los productos básicos o extender la bajada del IVA de la luz y el gas más allá del 31 de diciembre.
La portavoz popular denuncia que Sánchez dispone de un extra de 27 mil millones de euros de recaudación. "Puro cálculo electoral", ha dicho. Para Gamarra Sánchez necesita ese dinero de todos los españoles "para comprar voluntades". Le ha espetado que sus socios parlamentarios ya le están avisando de que le van a hacer sudar si quiere sacar las cuentas públicas en el Congreso donde necesita sus votos. "Le quieren por su debilidad", ha afirmado la portavoz que ha subrayado además de en que en España hay más de 13 millones de españoles en una situación de pobreza y exclusión social, una cifra que no se alcanzaba desde que gobernaba José Luis Rodríguez Zapatero. "Los socialistas nunca han sacado a España de una crisis. Nos han metido en todas y lo están volviendo a hacer", ha concluido.
El PP reprocha los 800 asesores de Moncloa, los 22 ministerios del gabinete o los 158 millones de euros gastados en "propaganda". "Su Gobierno gasta como nunca mientras los españoles se sacrifican como nunca", ha remarcado la popular que ha recomendado al presidente sumarse a la "rebelión" de los suyos, -en referencia a la decisión de algunos barones socialistas de hacer rebajas fiscales-, y a copiar las propuestas del PP porque "es urgente".
En su réplica, el presidente ha ironizado con que la pregunta se le había hecho "larga" a la portavoz del PP porque se había dedicado a hacer una suma de "eslóganes" y ha reivindicado los datos de empleo actuales para destacar que se habían recuperad los niveles previos a la pandemia mientras que en la anterior crisis financiera se tardaron 10 años.
Para Sánchez es una "falta de empatía" escuchar a Feijóo decir que es "antiguo" hablar de niños pobres cuando hay dos millones en situación de pobreza. "Lo antiguo es bajar los impuestos a los ricos", ha argumentado el presidente que ha puesto el ejemplo de Reino Unido. "Hable con sus amigos conservadores", le ha pedido al PP y pregunte cómo no se tiene que gobernar España.
El presidente, en una respuesta a la líder de Ciudadanos Inés Arrimadas, ha reivindicado que por primera vez en años el Gobierno está destinando recursos a la hucha del sistema público de pensiones después de que gobierno populares la esquilmaran. En ese sentido le ha pedido a Arrimadas que no compre "la mercancía barata" de que las pensiones están en peligro en un futuro.
La líder de la formación naranja le había afeado la subida de las pensiones vinculada al IPC, que rondará el 8,5 %, en el actual contexto económico de crisis y de inflación desbocada. "No tiene derecho a hipotecar a las próximas generaciones para pagar su campaña electoral, porque sus intentos de comprar votos hoy suponen vender el futuro de millones de españoles", argumentó.