Sánchez ha acudido al Congreso antes del inicio de los plenos de este periodo de sesiones para poner las pilas a los suyos. En el arranque del curso político el presidente del Gobierno quiere que sus diputados, senadores y europarlamentarios sean el altavoz de las medidas impulsadas por el Gobierno de coalición. El presidente les ha puesto deberes: les pide la "máxima implicación", que salgan a las calles y hagan "pedagogía" de la tarea del Ejecutivo "con la cabeza bien alta".
En la estrategia diseñada por Ferraz y Moncloa, todos los cargos socialistas tienen que estar activados con el objetivo común de movilizar al electorado. Sánchez quiere toda la maquinaria engrasada ante el ciclo electoral que hay por delante con las municipales y autonómicas en mayo y las generales en diciembre de 2023 y cuando todas las encuestas dan como perdedor al PSOE y como claro ganador a Alberto Núñez Feijóo.
En su intervención en la reunión de la interparlamentaria, Sánchez ha mantenido su ofensiva contra el líder del PP. Ha dibujado a una derecha con un único proyecto político, el de "bloquear en la Justicia los avances sociales" conseguidos en estos años de Gobierno de coalición. Una actitud que ha calificado grave, antidemocrática y peligrosa. Una derecha, ha dicho, presa de su pasado con un "legado de cenizas, paro, desigualdad y corrupción".
Ha querido calentar además la votación de este martes en el Congreso sobre los nuevos impuestos a las eléctricas y a la banca. El presidente pregunta al PP si van a votar contra "el sentido común" y el interés general". Reta directamente a Feijóo a retratarse con los impuestos: "¿Van a defender los intereses de la mayoría o los de una minoría, por muy poderosa que sea?". En ese sentido, el eje de todo su discurso, ha sido remarcar que su Gobierno trabaja para proteger a la clase trabajadora y avanzar para transformar y modernizar el tejido productivo y la economía. Un Ejecutivo, ha repetido una vez más, que "no obedece a intereses minoritarios".
Entre las medidas que ha puesto como ejemplo está la de la gratuidad de los abonos de Renfe. El presidente ha cifrado en un millón el número de abonados que se están beneficiando de los abonos de transporte en Cercanías y Media Distancia.
Ha querido dejarle claro a Feijóo que el Gobierno de coalición "va a seguir empeñado en avanzar en derechos y en libertades" hasta el final de la legislatura. En ese punto ha recordado su intervención en el Senado la pasada semana en su primer gran duelo parlamentario con el líder del PP y ha avanzado que "habrá más debates, dado el resultado".
Es la demostración más clara de que en Moncloa y en el partido están satisfechos con la estrategia del presidente de ir a por todas contra Feijóo y sembrar dudas sobre su solvencia. En un momento dado de su discurso de este lunes ha vuelto a repetir lo de "insolvencia o mala fe" que se convirtió en el mantra del Senado la semana pasada.
Para Sánchez estamos ante una de las legislaturas más "fecundas y reformista" de la historia. Ha subrayado que el Gobierno ha sacado adelante 161 iniciativas, de las que 74 han sido leyes, 37 con una mayoría superior a la de la investidura. Leyes, en su opinión, "revolucionarias y transformadoras" como el Ingreso Mínimo Vital, la Ley de eutanasia, la de igualdad de trato o la de protección a la infancia. También ha citado la Ley de Formación Profesional, la de Ciencia, la que permite mantener el poder adquisitivo de las pensiones y el nuevo marco de relaciones laborales.
De cara al futuro y a los objetivos en este periodo de sesiones ha nombrado la Ley de Memoria Democrática, la Ley de Industria o la Ley del Cine. Ha hecho hincapié en varias ocasiones en que el Gobierno aprobará los terceros Presupuestos Generales del Estado. "Vamos a por los terceros", ha afirmado entre los aplausos de los suyos.
Respecto a la oposición del PP a las medidas de ahorro energético emprendidas por el Gobierno, Sánchez ha reprochado a la derecha que los ciudadanos tienen más sentido común y están más comprometidos con el ahorro que "algunas élites tanto económicas, políticas y mediáticas que buscan crispar y dividir a la sociedad".
Sánchez ha sacado pecho de su papel en Europa en el debate energético y especialmente del mecanismo ibérico. "España es el país con mayor credibilidad de la UE en materia energética", ha dicho el presidente que recuerda que hace un año fue el primero en reclamar ante las instituciones comunitarias una reforma profunda y estructural del mercado de la electricidad que ahora están solicitando otros países. "Mientras el PP bloquea nuestra política energética en Europa van siguiendo el camino que marca España", ha proclamado.
Una reunión donde ha sido ratificado Patxi López como nuevo portavoz del grupo parlamentario socialista. El dirigente vasco fue designado por Sánchez portavoz este verano tras la salida de la vicesecretaria general del partido, Adriana Lastra, que provocó una serie de cambios de calado en la cúpula de Ferraz.
La diputada Isaura Leal, presidenta del PSOE de Madrid y una persona muy cercana a Sánchez, ha sido nombrada nueva secretaria general del grupo.