El congreso nacional de Junts per Catalunya ha servido a sus principales dirigentes para marcar perfil político, defenderse de sus causas pendientes por corrupción y cargar contra la mesa de diálogo con el Gobierno central que lidera ERC en la Generalitat. Junts acusa a Esquerra de una actitud servil ante el PSOE y, por ello, abre la puerta a salir del Govern.
Este viernes, el presidente catalán, Pere Aragonès, se vio con Pedro Sánchez. Superada la crisis del Pegasus, la mesa de diálogo se retoma. Este sábado, encuentro de Aragonès con Arnaldo Otegi. Ambos han decidido guardar silencio.
En su partido, eso sí, sacan pecho de la reunión. "Nosotros hemos conseguido que el Gobierno de este país y el Gobierno español se sienten en una mesa y que haya un reconocimiento del conflicto político, que se resuelve también con una mesa de negociación", exclama Oriol Junqueras, presidente de ERC.
Aunque el líder de la oposición en Cataluña, el socialista Salvador Illa, reclama a Aragonès que cumpla con su parte y que convoque a los partidos catalanes. "Sin esto no vamos a solucionar nada. Todas las opiniones son necesarias", subraya Illa.
Sin embargo, la de Junts per Catalunya es clara: no hay mesa que valga. "Eso solo nos quiere llevar a la parálisis, a la anestesia, a la rendición", destaca Laura Borràs, líder de la formación independentista.
Es más, tras el abandono del exmandatario Carles Puigdemont, han decidido apuntalar no solo a su dirección sino también su propio espacio político, yendo todavía más lejos: consultarán a sus bases seguir o no en el Govern.
Además, Junts blinda a Borràs, a la que la Fiscalía pide 6 años de cárcel y 21 de inhabilitación por presuntos contratos irregulares. "Las cloacas del Estado siempre actúan", afirma ella.
Amenaza de inestabilidad en el seno institucional soberanista que Esquerra no valora de momento. Ni ese ni otros posibles escenarios, como un eventual apoyo del PSC para acabar la legislatura, que en todo caso sería externo porque los socialistas, nos confirman, descartan entrar en un Ejecutivo con agenda independentista.