En Pamplona, en plenos Sanfermines, cuatro mujeres han denunciado en las últimas horas haber sufrido unos pinchazos que les produjeron mareos, por lo que se ha activado un protocolo de alerta por posible sumisión química. Es decir, la administración de sustancias estupefacientes a víctimas para abusar sexualmente de ellas o para robarles.
Los casos se habrían producido en la calle Arrieta y en la zona de El Redín a primera hora de la pasada noche. Posteriormente, se supo de dos casos similares relatados en el puesto de DYA en Paseo de Sarasate.
Las mujeres se sintieron desorientadas tras notar un leve pinchazo en el brazo, similar al de una aguja o una jeringuilla. Además de activarse el protocolo de sumisión química, que implica la recogida de muestras para análisis, se les ofreció la posibilidad de interponer denuncia. Todos los casos han sido derivados a la Policía Foral, detalla el diario Noticias de Navarra.
En los últimos meses se han registrado en Francia y en otros países de Europa numerosas denuncias de mujeres que aseguran notar un pinchazo y, poco después, comenzar síntomas como vértigo, náuseas o dolor de cabeza.
Los análisis clínicos realizados en Francia no han logrado determinar qué es exactamente la sustancia que se administra, ni si es la misma en todos los casos. No obstante, se sospecha que puede ser éxtasis líquido, conocido como 'la droga de los violadores', un narcótico inyectable que no se puede detectar en sangre horas después de ser administrado.