Un nuevo 'Santo Grial' ha llegado a la caza furtiva en Asia. Y es que en los últimos años la piel de elefante, antes despreciada, se ha convertido en una de los piezas más codiciadas en el mercado negro. El motivo de la nueva y extraña demanda tiene su origen en China, lugar en donde se utiliza para fabricar medicinas tradicionales y caras joyas que 'protegen' de dolencias médicas.
Para llamar la atención ante este grave y nuevo problema, el Gobierno de Myanmar ha decidido difundir la terrible imagen del cadáver de un elefante desollado. Según informa el Daily Mail, la instantánea fue tomada en una operación encubierta de la ONG británica Elephant Family. Los mismos activistas lograron infiltrarse en un taller de pieles ilegales y comprobar que son cientos los pedidos desde China.
Las cifras de elefantes despellajados en el país asiático son dispares. Mientras que el Ejecutivo habla de sólo cuatro en los últimos meses, fuentes no oficiales señalan que sería medio centenar los animales muertos desde principios de año. Una caza furtiva que esquiva la protección de estos ejemplares que se encuentran en peligro de extinción y cuyo comercio de piel está prohibido internacionalmente.