El poderoso tifón Rai ha tocado tierra este jueves en Filipinas tras convertirse en un supertifón, con vientos máximos sostenidos de 240 kilómetros por hora. El departamento de meteorología filipino PAGASA lo ha calificado como "muy destructivo", y ha informado de que la tormenta se va a seguir intensificando a lo largo del día. Unas 45.000 personas han sido evacuadas.
A las 13.30 horas (5.30 GMT) del jueves 16 de diciembre, el tifón Rai (conocido como Odette en Filipinas) tocaba tierra en la isla de Siargao con “vientos máximos sostenidos de 195 km/h cerca del centro, ráfagas de hasta 240 km/h y una presión central de 915 hPa”, ha informado PAGASA en su último actualización.
"Cerca de 16 millones de personas viven en cinco regiones que podrían verse afectadas, donde 3,8 millones se encuentran por debajo del umbral de la pobreza", ha alertado la ONU.
La tormenta se intensificó rápidamente el jueves por la mañana y pasó de un tifón a un supertifón. Cuando tocó tierra en la isla de Siargao en la costa este central, había alcanzado vientos sostenidos de 240 kilómetros por hora con ráfagas de más de 300 kilómetros por hora, equivalente a un huracán categoría 5 en el Atlántico, según la CNN.
*Imagen reciente del tifón Rai / Zoom Earth
"El tifón dejará fuertes precipitaciones que provocarán inundaciones y deslizamientos de tierra", ha alertado Ricardo Jalad, jefe de la PAGASA, en un comunicado. Entre las zonas afectadas, además de Siargao, estarán partes de Mindanao y Visayas.
En el Pacífico Occidental no existe una "temporada" definida para los ciclones tropicales, como sí ocurre en el Atlántico Norte (del 1 de junio al 30 de noviembre). Generalmente, la actividad ciclónica alcanza su punto máximo desde finales del verano hasta principios del otoño, pero los tifones pueden ocurrir en cualquier mes del año.
Filipinas se ve golpeado por una veintena de ciclones al año de media. El mayor tifón en golpear la zona tuvo lugar en noviembre de 2013 y dejó 6.300 muertos y 4 millones de desplazados.
Durante el pasado mes de abril Filipinas se vio sorprendida por el primer supertifón de 2021 en el Pacífico (donde a pesar no existir una temporada definida no suelen empezar hasta mayo), Surigae, con una presión central extraordinariamente baja de 890 milibares.