Un comité de expertos de la Organización Meteorológica Mundial (OMM) se ha sentado a hablar de rayos y ha decidido que tenemos no uno, sino dos nuevos récords. Las descargas eléctricas que últimamente vemos tanto en nuestro país duran apenas un par de segundos en general, de hecho los aficionados a la fotografía lo pasan mal hasta que consiguen una imagen que merece la pena. Pero no en Argentina. Al menos no el 4 de marzo de 2019. Aquel día vieron un rayo de casi 17 segundos. Es uno de los nuevos récords: el del rayo eterno.
¿Te imaginas? Un rayo de por sí puede ser aterrador, pero los que duran tantísimo entran en una categoría que los expertos llaman ‘megarrayos’. No es de extrañar: durante 16,73 segundos los satélites de la OMM captaron imágenes de una misma descarga en el cielo.
Fue en el norte de Argentina, y superó con creces el récord anterior, que se dio en el sur de Francia en 2012 y tuvo una duración continuada de 7,74 segundos. No es que lo haya superado, sino que ha sido más del doble de largo. De ahí lo de ‘eterno rayo’. Raro será que vuelva a registrarse algo así. El comité de evaluación sigue perplejo.
En cuanto al otro gran récord, en su caso hace referencia a la distancia del rayo. Es decir, su extensión horizontal. Pues bien, agárrate: ocurrió en el sur de Brasil y fue visible en 709 kilómetros (con un margen de error de 8 km). Casi como si se hubiera visto desde Sevilla a Tarragona, o desde Roma hasta Múnich. Una barbaridad.
De nuevo es una cifra muchísimo mayor a la marca que ostentaba el récord anterior, de 2007. Se produjo en Oklahoma y abarcó una distancia horizontal de 321 kilómetros, según recuerda la OMM.