Cuando decimos que no hay que fiarse de las 'apps' que te dicen el tiempo que va a hacer a varias semanas vista, es por algo: no existe sistema informático ni meteorólogo aventajado que pueda saber, a ciencia cierta, el tiempo que va a hacer dentro de tanto tiempo. Es imposible. La meteorología es la 'ciencia del caos', y la dinámica atmosférica se rige por innumerables factores: presión, humedad, vórtices polares, temperatura, dirección del viento, etc.
Sin embargo, existen algunas herramientas que nos pueden ayudar hacer algunas estimaciones, como el índice NAO (en español, Oscilación del Atlántico Norte), que básicamente es un índice numérico calculado para mostrar la 'fuerza' relativa entre el anticiclón de las Azores y la depresión islandesa, estructuras más o menos perennes (que no inamovibles). Se calcula con las medidas de presión de observatorios situados en los centros 'teóricos' de dichas estructuras. Además, este índice NAO establece una relación directa con la posición de la corriente de chorro, que es la que impulsa frentes y borrascas hacia Europa, y que en los mapas de previsión a 300 hPa (9000 metros) se aprecia muy bien.
Por resumir, cuando tenemos NAO en modo positivo, la corriente en chorro impulsa las borrascas y el viento húmedo hacia el norte de Europa (y no nos afectan). Cuando es negativo, los frentes y las borrascas se ven impulsados por este hacia el sur, llegando sobre todo a España y otros países del Mediterráneo.
"El índice NAO, ahora en boca de muchos ante este tiempo tan estable y estas temperaturas tan primaverales, no nos hace tener clara la situación, pues las anomalías de presión han comenzado a ser ligeramente positivas. Cuando tenemos fase positiva de la NAO, se producen inviernos cálidos y húmedos en Europa", apunta nuestra compañera y meteoróloga, Rosalía Fernández.
*Imagen: índice NAO para finales de mes, con una tendencia incierta / MeteoVigo
Eso significa que los modelos de predicción a medio plazo hablan de una tendencia a tiempo igualmente seco en nuestro país (que no en el resto del continente), y que quizá en los últimos días de mes empiece a ser más húmedo por la llegada de borrascas y frentes: "En estos momentos el anticiclón del centro de Europa ejerce de bloqueo, impidiendo que las bajas presiones causantes de la inestabilidad lleguen hasta nosotros", explica Fernández, quien puntualiza que esto de todas formas no impedirá "que algunos sistemas frontales afecten al tercio norte y dejen algunas precipitaciones".
En cuanto al frío, este anticiclón también hará de bloqueo de masas de aire: "Se quedarán frenadas en el Atlántico norte", apunta nuestra meteoróloga.
En medio de toda esa vorágine de tranquilidad, también hay algún que otro momento en el que podremos disfrutar de las lluvias. El siguiente cambio puntual de tiempo podría llegar este mismo fin de semana por el paso de un pequeño frente que haga descender los termómetros en los primeros días y produzcan algunas lluvias en el norte peninsular.
Además, en Canarias sí que estarán pendientes del paso de una borrasca que les estropeará el tiempo en el primer fin de semana de Carnaval.