Arranca la temporada alta de festivales musicales en España. Más de 200 eventos musicales se llevarán a cabo este año a lo largo y ancho de la Península Ibérica, las islas Canarias y Baleares, y con ellos una marabunta de acérrimos de la música que se moverá al son de sus grupos y solistas favoritos. Sin embargo, donde muchos solo ven diversión y buen rollo, otros se percatan del peligro porque en toda aglomeración humana suelen producirse accidentes y contratiempos inesperados. Un estudio holandés alerta sobre el efecto directo de la luz estroboscópica –habitual en los festivales de música dance–, en el riesgo de padecer ataques epilépticos. Una nueva contingencia a las habituales en estos eventos, sobre todo los golpes de calor, lipotimias y quemaduras en la piel que provocan estar muchas horas con temperaturas altas y sin protección solar.
Patologías de los macroconciertos
Intoxicaciones etílicas, sobredosis, enfermedades de transmisión sexual, roturas, esguinces y cortes en la piel suelen ser las patologías vinculadas a los macroconciertos de verano, que en época estival se multiplican hasta el infinito y más allá. Pero un grupo de investigación del Centro Médico Universitario VU de Ámsterdam (Países Bajos) ha alertado sobre las consecuencias de la luz estroboscópica en individuos susceptibles de padecer ataques epilépticos. Según este estudio, este tipo de fuente luminosa puede triplicar el riesgo de sufrir estos episodios en personas con cierta predisposición que acudan a estos espectáculos de música dance.
Destellos peligrosos
Este tipo de luminosidad emite una serie de destellos muy breves en rápida sucesión con el objetivo de provocar múltiples exposiciones de un mismo movimiento. Según recoge Agenciasinc.es, los investigadores tomaron como muestra de estudio las 2.776 personas que necesitaron asistencia médica en los 28 festivales de este tipo de música celebrados en los Países Bajos durante 2015. De los 39 casos de epilepsia, 30 se produjeron durante las actuaciones nocturnas, por lo que se llegó a la conclusión del aumento de este tipo patologías en horario de noche frente al diurno cuando la intensidad de este tipo de flashes es menos potente.
Advertencias y precauciones
Y un dato más y muy significativo, la mayoría de los que padecieron estas convulsiones no habían consumido estupefacientes y era la primera vez que mostraron un cuadro clínico de estas características. Los responsables de este estudio observacional insistieron en la importancia de que los organizadores informen como es debido a la audiencia de los peligros de este tipo de luces, y que los festivaleros tomen las precauciones debidas.
Golpes de calor y lipotimias
Asimismo, en época estival el calor es un agravante de los casos típicos de desfallecimientos y lipotimias en situaciones de aglomeración o ingesta de alcohol y drogas. Muchos de estos eventos comienzan su programación por la tarde, por lo que también se pueden dar casos de quemaduras por exposición al sol. En el pasado Champions Festival, con motivo de la final de fútbol entre el Liverpool y el Tottenham, se atendieron en la plaza de Callao y Sol a 57 personas que sufrieron mareos y desfallecimientos.
La exposición al sol sin protección durante horas es otro de los trastornos habituales de este tipo de concentraciones humanas, así como las deshidrataciones por el abuso del alcohol y la escasa ingesta de agua. También son habituales los resfriados por los cambios bruscos de temperatura entre los días calurosos y las noches frías.