Riadas, inundaciones, crecidas, desbordamientos,… las imágenes que han dejado esta Semana Santa han sido impresionantes. Se han llegado a acumular más de 300 litros por metro cuadrado en algunas zonas del Levante español, una circunstancia que hacía más de 50 años que no se daba para un mes de abril. De hecho, estas lluvias producidas por un sistema convectivo mesoescalar (una agrupación de tormentas) han dejado algún que otro récord, como en la estación del Aeropuerto de Alicante-Elche, donde este abril es ya el mes más lluvioso fuera del otoño desde 1967, al acumularse al menos 173 l/m(2) de lluvia desde el pasado jueves.
Ahora, con el temporal de Levante amainando tenemos que mirar hacia el Atlántico. Por allí se están formando una serie de borrascas cuyas colas, los frentes, nos van a afectar directamente. Entrarán primero por Galicia, enturbiando unos cielos que hasta ahora han permanecido sorprendentemente despejados. Las lluvias serán más abundantes en todo el Cantábrico, si bien es cierto que tocará sacar el paraguas en prácticamente todo el país.
El día más lluvioso e inestable será el miércoles, donde además se prevén precipitaciones en forma de nieve en cotas en torno a los 1000 metros y acumulaciones según el modelo GFS por encima de los 50 cm en Pirineos. Además, se reactivará el viento con rachas que pueden alcanzar los 90 y 100 km/h en ciertas regiones del norte, y más de 55 km/h en el resto.
El jueves también seguirán las lluvias, pero los mapas apuntan a que en general lo hará con menos intensidad que el día anterior. Sin embargo, el viento en Galicia ganará fuerza y, de hecho, ya están activados los avisos costeros naranjas por mar combinada del W a NW de 5 a 6 metros.
No será a partir del viernes cuando las lluvias empiecen a retirarse de la Península, con algunas precipitaciones débiles y ocasionales en Galicia y el extremo norte peninsular, donde estará nuboso o con intervalos nubosos.
Tampoco se descarta alguna tormenta aislada en el Pirineo oriental durante la tarde. En general, se irán imponiendo las altas presiones y los cielos comenzarán a despejarse, dejando un fin de semana de mucha calma meteorológica, con temperaturas en ascenso que terminarán por situarse incluso por encima de lo normal tanto el sábado como el domingo.
*Imagen: prob. de precipitación para diferentes umbrales desde el martes hasta el sábado / Aemet
En conclusión: a partir del viernes volverán a lucir los cielos azules en todo el país, con lluvias que irán desapareciendo durante el fin de semana. Las altas presiones ganarán terreno tras unos días en los que la inestabilidad se ha coronado y que nos ha regado, después de muchos meses de sequía, los campos de buena parte del país.