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"Dentro del ojo del huracán Dorian". Con estas palabras el Centro Nacional de Huracanes (NHC, pos sus siglas en inglés) ha tuiteado las imágenes del fenómeno de categoría 5 –la máxima– que ha arrasado Bahamas y se dirige al sureste de Estados Unidos. Entre paredes de nubes muy densas y con dificultad, el piloto Ian Sears grabó el centro de la tormenta, donde se da un fenómeno conocido como 'efecto estadio'.
El domingo Dorian devastó las islas de Abaco y Grand Bahama con vientos de más de 250 km/hora, una marea muy violenta y lluvias fortísimas. El centro NOAA que lo monitorea se dirigió a investigar de primera mano lo que sucedía 'detrás de la tormenta' entre ráfagas que luchaban contras las hélices de la aeronave 'Kermit'. Desde el cielo se aprecia un enorme cono formado por nubes, más ancho en altura que en superficie y hueco en el centro, en lo que se conoce como el 'ojo del huracán'.
Según ha explicado 'The Washington Post', las paredes de nubes en el centro de la tormenta se forman por "plumas de aire que rápidamente se arremolinan en torno a la tormenta y alimentan su aluvión de lluvias y vientos".
Se trata de un fenómeno atípico que puede darse en huracanes de categoría 3 a la 5. Se refiere principalmente a la forma cónica del ciclón que, desde la vista aérea, es muy evidente. Esta es la imagen que ha compartido la NOAA (Administración Nacional Oceánica y Atmosférica).
El servicio público llamado 'Ready', del Departamento de Seguridad Nacional, ha difundido en varios idiomas una serie de acciones que llevar a cabo durante la tormenta en la zona afectada. Entre ellas, seguir las indicaciones en caso de evacuación –ya hay casi un millón de evacuados solo en EEUU por Dorian–, refugiarse en espacios pequeños, sin ventanas y en una planta inferior sin riesgo de inundarse, o subir al piso más alto en caso de quedar atrapado en un edificio. Se advierte a su vez de que en ningún caso se debe caminar, nadar o conducir hacia zonas inundadas, ya que el agua puede arrastrarte rápidamente.
En su camino hacia Florida, Georgia y Carolina del Sur, Dorian ha perdido algo de fuerza y se sitúa ahora como de categoría 4. A pesar de descender en la escala Saffir-Simpson, esta intensidad implica que podría dejar rachas superiores a los 200 km/hora y una subida importante del nivel del mar –en el caso de las Bahamas osciló más de 5 metros–. Se calcula, incluso, que podría no tocar tierra y pasar en cambio muy cerca de la costa sureste de EEUU, en cuyo caso los fuertes vientos serían suficientes para provocar desperfectos en estos estados.
El último aviso público del NHC informa de una continuidad de los vientos huracanados en la isla de Grand Bahama y de la proximidad de la tormenta a West Palm Beach, Florida.
*Imagen: Monitoreo de ciclones tropicales del Centro Nacional de Huracanes / NOAA