España ha sido estos días uno de los países con el peor aire del mundo para la salud por la densa nube de polvo que llega desde África. La calima ha reducido la visibilidad drásticamente y generado lluvias de barro en muchos puntos del país, además de obligar a restringir las actividades al aire libre de la población y limpiar estatuas y monumentos por parte de las autoridades. Así se ha vivido.