A las puertas del 2021, el 2020 sigue trayendo sorpresas. Esta vez, en forma de copos de nieve, que van a seguir regalándonos una estampa de lo más navideña los días de Fin de Año y Año Nuevo (y al menos hasta Reyes). Pero no sin algunos riesgos. La Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) y Protección Civil están avisando a la población de la necesidad de extremar la precaución en los próximos días en al menos 15 provincias. Los avisos meteorológicos se han multiplicado.
La borrasca Bella se va alejando no sin antes haber cubierto varios pueblos del norte y centro de España de blanco. También ha dejado, y lo seguirá haciendo hasta bien entrada la tarde del miércoles, unas olas espectaculares, de hasta 9 metros, en las costas del norte, que se llevaron por delante a un hombre que corría en Guipúzcoa en el espigón de Orio.
Una veintena de provincias en el norte y este peninsulares permanecen bajo aviso naranja (riesgo importante) y amarillo (riesgo bajo) durante este día 30, a medida que la atmósfera da una breve tregua en el resto de España. Pero no será por mucho tiempo.
Todo hace prever ya con bastante fiabilidad que los días de Nochevieja y Año Nuevo serán gélidos por una irrupción polar en la Península Ibérica. El motivo lo encontramos en las altas presiones atlánticas, que se han asentado sin intención de moverse, por lo que lo más seguro es que el aire frío siga canalizándose hacia España en el comienzo de 2021.
*Temperatura a 850 hPa y geopotencial a 500 hPa previstos entre el miércoles y domingo por el modelo ECMWF
Un frente entrará en la Península, pronostica la Aemet, y “afectará con nubosidad y precipitaciones a algo más de la mitad noroccidental peninsular el jueves 31”. Después, “a partir del final de la tarde y por la noche, con menor probabilidad e intensidad cuanto más al sur y al este, podrían caer en la meseta Sur y el resto de Aragón”.
Estarán en aviso un puñado de localidades de Asturias, Cantabria, Castilla y León, La Rioja, Navarra, Aragón y Madrid por las nevadas, que empezarán generalmente por la tarde-noche y podrán descargar 12 centímetros de nieve a lo largo del día.
Sin embargo, serán los días 1, 2 y 3 de enero cuando el frío se instale del todo y las nevadas se extiendan. El frente que entraba el día 31 seguirá barriendo la Península los días siguientes seguido de un flujo de viento gélido del noroeste. La Aemet avisa de precipitaciones que podrán “ser localmente persistentes en las sierras del nordeste andaluz y localmente fuertes en Baleares, sin descartarlas en el resto” el día 1, y de una caída de la cota de nieve hasta los 500 metros, incluso los 400 m en Pirineos y los sistemas Central e Ibérico.
Los días 2 y 3 el pronóstico cambia poco. Existe una alta probabilidad de que nieve en cotas muy bajas, por encima de los 400-500 metros en toda la Península, y se prevén “heladas generalizadas en casi todo el interior peninsular”, según la Aemet.
En Canarias, por su parte, la aproximación de una borrasca atlántica aumentará la probabilidad de precipitaciones en las islas occidentales, especialmente en La Palma.
Aún hay incertidumbre, pero parece que la semana que viene nos afectará un tren de borrascas y posiblemente alguna DANA (depresión aislada en niveles altos, o eso que a veces llamamos ‘embolsamiento de aire frío’).
El modelo europeo ECMWF prevé desde hace varios días nevadas generalizadas que llegarán en algún momento de la semana. El pronóstico de la Aemet coincide por ahora: “Es posible que la interacción de una masa de aire templado y húmedo del suroeste, con la masa de aire frío estancada sobre la Península de días anteriores, provoque nevadas significativas en amplias zonas de ambas mesetas y otras zonas altas de la Península”.
*Nevadas previstas entre los días 4 y 7 de enero por el modelo ECMWF