La DANA se convierte en el desastre natural con más víctimas mortales en la historia de España

El fuerte temporal que ha sacudido principalmente a la Comunidad Valenciana y Castilla-La Mancha está dejando un balance desolador con al menos 95 fallecidos en nuestro país. Unos datos que ya han entrado en la historia más negra de España, superando las cifras mortales de las catástrofes que ocurrieron en la riada del camping de Biescas, con 87 muertos en 1996, y la riada del Turia, con 81 en 1957.

Andalucía, Comunidad Valenciana, Cataluña, Castilla-La Mancha y Aragón son algunas de las comunidades autónomas que están sufriendo los efectos de la DANA, encontrándose en alerta amarilla, naranja y roja. Tras dos días de temporal, la provincia que peor se encuentra es Cádiz, que se encuentra en "riesgo extremo" tras acumular durante 12 horas más de 120 mm. Casi todo el país ha vivido el mismo escenario, paisajes marcados por el caos, con coches flotando, accidentes, calles inundadas, casas destrozadas, ríos desbordados y numerosos rescates de los servicios de Emergencias, Guardia Civil, Bomberos y Policía Nacional para salvar la vida del mayor número de personas, informa Manu Reyes.

La Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) asegura que esta DANA es la gota fría "más adversa" de lo que va de siglo en la Comunidad Valenciana, con un impacto y registros superiores a la DANA de septiembre de 2019 y a la altura de los dos grandes temporales de los años ochenta, el de octubre de 1982, la pantanada de Tous que dejó al menos 30 muertos; y el de noviembre de 1987, con cuatro fallecidos.

La DANA supera a la riadas de Valencia y del camping de Biescas

El desastre natural que más vidas se había cobrado en nuestro país hasta llegada de la DANA fue la riada de Valencia en 1957. Un suceso natural que anegó la ciudad causando entre 81 muertos, miles de damnificados, además de cuantiosos daños materiales. De hecho, este suceso marcó el devenir y desarrollo de Valencia, llevando a cambiar en 1973 el cauce del río Turia con el fin de evitar que se repitiera una catástrofe de la misma magnitud.

El segundo desastre natural de España ocurrió en la riada del camping de Biescas, en la provincia de Huesca. Ocurrió el 7 de agosto de 1996, cuando una crecida repentina del torrente de Arás arrasó el camping Las Nieves, provocando la muerte de 87 personas y dejando heridas a más de 187.

Las de Bilbao, Sevilla y la Tragedia del Llanito no superaron los 34 fallecidos

Detrás de esta DANA se encuentra, por número de víctimas, la riada de Bilbao del 26 de agosto de 1983, cuando debido a un diluvio el río Nervión se desbordó, ahogando a 34 personas y arrasando el casco viejo bilbaíno así como las riberas de otros municipios limítrofes.

Asimismo, en 1957 perdieron la vida de 34 personas en la isla de la Palma, en lo que se conoce como la 'Tragedia del Llanito', cuando un temporal recorrió el archipiélago canario y provocó lluvias torrenciales. El desbordamiento, además, destruyó multitud de casas y destruyó grandes hectáreas de cultivos.

Tampoco quedan lejos la riada de Badajoz de 1997 que dejó 25 fallecidos, y que provocó numerosos daños en la capital pacense, o la riada del Tamarguillo de Sevilla en 1961, recordada por la tragedia de la operación de rescate 'Clave', en la que una avioneta que acompañaba a una caravana de auxilio se enredó con unos cables de alta tensión y se precipitó contra una multitud, provocando la muerte de 20 personas y más de 100 heridos.

Por debajo de la cifra de 20 muertos los desastres naturales en las pasadas décadas son innumerables, aunque entre los más destacados se encuentra el terremoto de Lorca (Murcia) en 2011, en el que un temblor de magnitud 5,1 provocó la muerte de 9 personas y dejó heridas a 324.

Además de los incendios y olas de calor que se han producido en España, cada vez con mas asiduidad debido al cambio climático, en los últimos años ha habido otros fenómenos naturales recordados no tanto por la muerte de personas sino por el coste material, como fue la erupción del Volcán de La Palma de 2021, o la nevada de Filomena, que afectó a extensas partes del país a principios de ese mismo año.