Estos días ha empezado un ascenso térmico más acorde con el mes en el que estamos. Llega el calor y se van las lluvias, al menos de momento. Porque las predicciones estacionales del Centro Europeo de Predicciones Meteorológicas apuntan a que en julio, agosto y septiembre tendremos más precipitaciones de las habituales en esta época.

De hecho, en unos días volveremos a tener lluvia y bajada de temperaturas, según apunta Rubén del Campo, portavoz de la AEMET: "Estos días tendremos bastante calor, pero llega de nuevo una borrasca que trae tormentas, eso sí cuando pase volverá subir otra vez las temperaturas. En cualquier caso este veranos va a ser muy caluroso pero puede haber más lluvias de lo normal, será un verano más tormentoso que el año pasado", comenta.

Por tanto tendremos que acostumbrarnos a un vaivén de calor y lluvias. Las predicciones apuntan a una mayor probabilidad de DANAS y vaguadas que provocarán una mayor actividad tormentosa.

De acuerdo con los datos que se manejan, se esperan un alto porcentaje de precipitaciones en los meses de verano.

Aunque se estima que será un verano caluroso, hay también una probabilidad de entre el 40% y 50% de que sea un trimestre con más lluvia de lo habitual.

"Las precipitaciones estarán presentes en verano, posiblemente en forma de tormentas. Las anomalías positivas de precipitación más destacadas las prevemos en zonas del interior y este peninsular así como en Baleares", explican desde eltiempo.es por lo que se cree que los meses de agosto, septiembre y octubre traerán precipitaciones muy por encima de la media en todo el interior, nordeste y Baleares, destacando el sur de Cataluña.

Esta combinación de temperaturas muy elevadas y más humedad, provocará también que el verano sea bochornoso.

Una tendencia de unos meses más lluviosos de lo normal provocado por DANAS o vaguadas que afectarán a la península.  

"Cuando en verano tenemos estos episodios de altas temperaturas que se ven sustituidos por estos episodios de tormentas, normalmente están favorecidas por una DANA o por una vaguada, que no es otra cosa que una lengua de aire frío en las capas altas de la atmósfera", explica el portavoz de la AEMET.

Unas lluvias que pueden ser de varios días o no, según apunta del Campo: "Parece que se nos está metiendo en el imaginario colectivo el concepto de DANA como si fuera una situación de lluvias torrenciales y no tiene porqué. Una DANA es una área de bajas presiones en niveles altos de la atmósfera que provoca inestabilidad atmosférica y que entre otras cosas puede dar lugar a tormentas. Es decir, son la causa de las tormentas y es un fenómeno en verano relativamente normal". Y eso es lo que apuntan las predicciones que va a pasar.