A finales del año 2022 se habló mucho de una posible ola de frío extremo en España. Pero, ¿qué se sabe de la rotura del vórtice polar? ¿Nos enviará aire del Ártico finalmente este invierno? Los expertos han observado algunos cambios en su comportamiento recientemente.
Se estima que la ruptura del vórtice polar ocurre una vez cada dos inviernos, pero esto no es necesariamente así siempre. En el pasado hemos tenido algunos episodios de fríos y nevadas asociados a este evento que quedaron en el recuerdo de todos, como el de 2018 con la Bestia del Este que recorrió Europa, o Filomena en 2021, que enterró buena parte de España bajo un espeso manto blanco. Y este año, ¿qué nos espera?
Por el momento no hay ninguna certeza de que vaya a romperse el vórtice polar o que vaya a haber una ola de frío en España en las próximas semanas, pero tampoco es descartable.
Actualmente se está desarrollando un posible calentamiento súbito estratosférico, con un ascenso radical en la temperatura (de decenas de grados) en esta capa de la atmósfera, la estratosfera (alrededor de los 15 y 20 kilómetros de altura).
“Cuando se produce una subida de la temperatura muy potente en la estratosfera en poco tiempo que llamamos ‘calentamiento súbito estratosférico’, que lo que hace es debilitar el vórtice polar, y puede hacer que se rompa”, detallaba hace unas semanas Rubén del Campo, portavoz de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet).
Si esto ocurre, el aire frío que suele quedar confinado al Polo Norte se descolgaría hacia latitudes más bajas como la nuestra, pero quizá lo haga en otra dirección, como Norteamérica o Asia. Es imposible saber por ahora entonces si finalmente tendremos una ola de frío.
Hasta el momento, enero nos ha traído ya el primer episodio de frío intenso en España por la llegada de una masa de aire polar continental.
"Estamos ante una situación de pleno invierno, aunque no se satisfacen los criterios de intensidad, extensión y duración para poder hablar de una ola de frío", ha confirmado Del Campo que, en todo caso destaca que estas temperaturas son muy bajas y pide extremar la precaución con las heladas, sobre todo en el extremo norte.
Por allí podremos ver además nevadas no solo en las zonas de montaña, como también ocurrirá en el resto del país, sino en regiones mucho más bajas de Navarra, el País Vasco, Castilla y León, y posiblemente en el entorno del sistema Central, entre Madrid y Segovia. En todas estas áreas es posible que se produzcan problemas en carreteras por la acumulación de nieve y placas de hielo.
Para la próxima semana, no obstante, el portavoz de la Aemet ha adelantado que veremos un ascenso de los termómetros. “De cara al miércoles o jueves se superarán los 10 ºC al mediodía en buena parte del norte y los 14-16 ºC en el centro y sur peninsular, rozando incluso los 18 ºC en el área mediterránea y valle del Guadalquivir a mediados de semana”, ha señalado.
Apenas lloverá, si acaso lo hará en puntos del norte y en la segunda mitad de la semana quizá en el área mediterránea, pero no está claro, siguiendo la previsión de los modelos meteorológicos.
Durante la segunda quincena de febrero tampoco una tendencia clara en cuanto a las lluvias, pero lo que sí parece es que “continuará el ambiente más templado de lo normal para la época en el este de la Península y los archipiélagos, sobre todo en la tercera semana del mes”, ha dicho Del Campo, por lo que una ola de frío parece poco probable por ahora.