Un tremendo diluvio ha causado al menos diez muertos en Italia, región central de Las Marcas, que se encuentra en la costa adriática. Las lluvias han descargado 420 litros por metro cuadrado de agua en menos de siete horas, la mitad de lo que llueve en un año normal, dando lugar a inundaciones fatales.

"Más de 150 intervenciones llevadas a cabo. Siete muertos y tres desaparecidos", ha dicho el Departamento de Bomberos en su cuenta en la red social Twitter, antes de agregar que "decenas de personas que se refugiaron en tejados de casas y árboles han sido rescatadas durante la noche" y los equipos de rescate aún buscan supervivientes.

La Agencia EFE confirma que la cifra habría ascendido a diez en las últimas horas.

Las imágenes son catastróficas, con riadas que arrastran todo a su paso al desbordarse varios ríos, como el Misa en Senigallia, que ha dejado varias aldeas aisladas, carreteras rotas y puentes colapsados.

La región estaba en alerta por lluvias, pero nadie imaginaba algo así. "Fue como un terremoto", lo ha descrito el alcalde de la ciudad de Serra Sant’Abbondio a la radio italiana RAI.

"Estos aguaceros extremadamente violentos estaban asociados a un sistema convectivo que estuvo prácticamente estacionario en la zona durante horas, regenerándose sobre el mismo punto".

Una vaguada se formó sobre el este del país y arrastró mucha humedad sobre la zona, que además por su orografía favoreció la formación de tormentas.

El presidente de la región de Marche, Francesco Acquaroli, ha manifestado a través de Facebook que está siguiendo de cerca "el desarrollo de la grave crisis meteorológica". "Estos son momentos de aprensión extrema", ha agregado.

Asimismo, ha desvelado que ha recibido llamadas del presidente y el primer ministro en funciones de Italia, Sergio Mattarella y Mario Draghi, respectivamente, para abordar la situación. "Mattarella ha expresado su solidaridad con nuestra comunidad y su gratitud a todos los que trabajan incansablemente en tareas de socorro", ha dicho.

Así, ha apuntado que Draghi ha garantizado "todo el apoyo para lo que sea necesario". "El dolor de lo que ha pasado es profundo, pero la comunidad de Marche es fuerte y sabremos como reaccionar", ha agregado Acquaroli en un segundo mensaje en esta red social.