España va a esquivar todas las borrascas en junio. Un “muro” anticiclónico se ha instalado sobre la Península Ibérica y está desviando la tempestad hacia otras zonas de Europa, como Francia, donde se están recuperando de la tremenda granizada del fin de semana y los más de 40.000 rayos caídos. Aquí nos espera calor infernal, propio del verano más abrasador, cuando no hay quien camine por la calle. ¿Dónde hará 40 ºC y hasta cuándo?
El primer fin de semana de junio ha sido tormentoso en Lugo o Zaragoza, y templado en la mayor parte de España, con temperaturas en torno a los 27 ºC. Aunque eso no ha impedido abrir ya muchas piscinas, en vista de que este año no habrá que “sacar el sayo” por el cuarenta de mayo.
De hecho, a partir del lunes se espera que las temperaturas escalen grados hasta situarse en valores que serían demasiado altos incluso para el verano el fin de semana.
La estabilidad atmosférica provocada por el anticiclón favorecerá que el sol caliente mucho, ha explicado el portavoz de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), Rubén del Campo, provocando temperaturas altísimas en España. En estas fechas, el sol se encuentra ya bastante lejos del horizonte y alto en el cielo, lo cual significa que calienta más durante más tiempo.
Además, apenas se esperan nubes en la mayor parte de España. Habrá, si acaso, algunos chubascos en el inicio de la semana en zonas de montaña y en el extremo norte de la Península. Tampoco se espera mucho movimiento de los vientos, excepto en zonas costeras del norte y el este, donde sí calentarán algo más.
Al final de la semana, un frente podría causar algunas precipitaciones en el Cantábrico y el entorno de Pirineos, y la formación de nubes de evolución en zonas de montaña del norte y el este peninsular.
A partir del jueves, en buena parte del país las máximas superarán los 35 ºC, e incluso podrán ser superiores a 38 ºC en el centro y el sur. Ese día rozarán o alcanzarán los 40 ºC en puntos de los valles del Guadiana y del Guadalquivir, como en Badajoz o Córdoba; tendrán unos 37 o 38 ºC en Toledo o Ciudad Real y unos 36 ºC en Madrid. Por la noche, las temperaturas no bajarán de 20ºC en el Mediterráneo, Baleares, mitad sur y zona centro.
De esta situación de calor intenso solo se librará el área cantábrica, donde incluso tendrán un ambiente "fresco" para la época, con máximas de 20 ºC en Santander o San Sebastián.
El fin de semana se sumará a la estabilidad atmosférica una masa de aire muy cálido procedente del norte de África, que disparará más las temperaturas, avisa el meteorólogo de la Aemet. Así, el sábado y el domingo podrá hacer más de 35 ºC en buena parte del interior peninsular; se superarán los 40 ºC en los valles del Guadiana y del Guadalquivir. Las noches tropicales seguirán en el Mediterráneo, centro, sur de la Península y pueden producirse algunos chubascos tormentosos en el tercio oeste.
En cuanto a Canarias, el portavoz de la Aemet ha pronosticado que también subirán las temperaturas durante los próximos días de modo que en el sur de las islas se pueden superar los 30 o 32 ºC y el archipiélago tendrá cielos en general poco nubosos salpicados por algunas nubes en el norte de las islas de mayor relieve.
Por otro lado, llegará polvo en suspensión que dará lugar a calima que enturbiará los cielos, reducirá la visibilidad y empeorará la calidad del aire.
El descenso térmico comenzará el lunes, sobre todo en la mitad occidental, aunque seguirá haciendo calor intenso en el este y en Baleares. De los 39 ºC en Madrid o Toledo pasaremos a los 36, y en Andalucía se rondarán los 38. En León o en Burgos también se mantendrán las temperaturas por encima de 30 ºC, y en Zaragoza o Pamplona hará unos 37 ºC.
En conjunto, la semana que viene hará entre 1 y 6 ºC más de lo normal para la época del año, excepto en las islas Canarias.