Es por todos sabido que el hecho de adquirir una vivienda supone soportar una serie de cargas fiscales. Una de las alternativas a eso sería construir una vivienda. Sin embargo este hecho también implica soportar una serie de obligaciones fiscales que es importante conocer de antemano para poder planificar de la mejor manera posible el presupuesto y evitar incómodas sorpresas financieras. Estos son los principales impuestos y tasas asociadas al proceso de construcción de una casa:
El primer paso para construir una vivienda es tener en nuestro poder un terreno, lo que habitualmente se consigue mediante la adquisición del mismo. Este hecho conlleva diferentes impuestos que varían según la naturaleza del vendedor:
Este es un impuesto municipal que grava la realización de cualquier construcción, instalación u obra para la que se requiera licencia urbanística. El tipo impositivo varía según el municipio, pero generalmente oscila entre el 2% y el 4% del presupuesto de ejecución material de la obra.
La construcción de una vivienda está sujeta al IVA:
Además del ICIO, los ayuntamientos pueden exigir otras tasas relacionadas con la construcción, como la tasa por licencia urbanística, que grava la obtención de permisos necesarios para la construcción, o la tasa por prestación de servicios urbanísticos, que está relacionada con servicios municipales que facilitan la ejecución de la obra.
Aunque no son impuestos, es importante también tener en cuenta que los honorarios de los profesionales involucrados en el proyecto, como pueden ser los arquitectos y aparejadores, están sujetos también a un 21% de IVA.
Una vez finalizada la construcción y obtenida la cédula de habitabilidad, la vivienda estará sujeta al IBI, un impuesto municipal anual cuyo importe depende del valor catastral del inmueble y del tipo impositivo establecido por el ayuntamiento correspondiente.
Hay que tener también en cuenta que hay algunas comunidades autónomas y municipios que ofrecen deducciones o bonificaciones fiscales para la construcción de viviendas, especialmente si se destinan a vivienda habitual o incorporan criterios de eficiencia energética. En estos casos es recomendable consultar la normativa específica de la localidad donde se ubique el terreno.
Además, también se debe tener en cuenta que las normativas fiscales pueden sufrir modificaciones. Por ello, es aconsejable verificar la legislación vigente en el momento de iniciar el proyecto y, de ser necesario, buscar asesoramiento profesional para garantizar el cumplimiento de todas las obligaciones fiscales.
En definitiva, la construcción de una vivienda en España implica el pago de diversos impuestos y tasas que pueden suponer una parte significativa del presupuesto total. Una planificación financiera detallada y el conocimiento de las obligaciones fiscales asociadas son fundamentales para llevar a cabo el proyecto con éxito y evitar contratiempos económicos.