Es tiempo de rebajas y, con ello, el riesgo de sufrir ataques a través del uso de tarjetas de crédito o débito aumenta, especialmente en un momento marcado por las restricciones de aforo en toda España. Con el comercio online más activo que nunca, es importante extremar la precaución: “Personalizar los límites y restricciones de nuestra tarjeta no nos llevará más de diez minutos y puede ahorrarnos más de un disgusto”, tal y como recuerda Agustina Battioli, especialista en Tarjetas & Créditos en el comparador financiero HelpMyCash.com. ¿Cómo proteger nuestras tarjetas (y nuestro dinero) al comprar online?

Las restricciones de horario, aforo y superficie en los comercios para intentar frenar la tercera ola del coronavirus han provocado que una de las principales fórmulas de los consumidores para comprar durante las rebajas sea la vía online. De hecho, cuatro de cada diez españoles afirma comprar más online ahora que en la época precoronavirus, de acuerdo con un informe de Ipsos de octubre de 2020.

Sin embargo, según la última Memoria de Reclamaciones del Banco de España, ocho de cada diez operaciones fraudulentas con tarjetas estuvieron relacionadas con las compras online en 2019. En este marco, “los avisos por compras o por sacar dinero son casi una alternativa obligatoria de activar, que es gratis y que nos permite conocer al instante en el móvil si nuestra tarjeta ha sido utilizada, permitiéndonos apagarla si detectamos movimientos que no identificamos”, recuerda Battiolli.

Así, gracias a las nuevas tecnologías, los bancos permiten, a través de sus aplicaciones móviles, cambiar la configuración de seguridad de las tarjetas para adaptarla a nuestro perfil como consumidores. Personalizarla nos ayudará a saber cuándo se usa la tarjeta y a restringir aquellas operaciones que no realizamos a menudo.

Para ello, solamente deberemos acceder a la aplicación de nuestro banco, seleccionar la tarjeta que queremos personalizar y pinchar sobre la opción “seguridad” o “configuración”. La mayoría de las entidades permite activar avisos (notificaciones en el móvil o SMS) por compras o por sacar dinero con la tarjeta. Esta es una de las configuraciones más importantes y siempre es recomendable tenerla activada, según el comparador financiero, ya que "nos permitirá estar al tanto en todo momento de cualquier operativa que se haga con nuestra tarjeta e identificar si hay algún movimiento que no hemos hecho nosotros".

También es posible fijar una cantidad de dinero límite para comprar online o activar y desactivar la posibilidad de usar nuestra tarjeta para hacer compras por Internet, así como restringir las compras en otros países.

Una de las ventajas de poder hacerlo a través de la app del banco es que podremos activar y desactivar las restricciones o cambiar los límites de manera inmediata en cualquier momento y todas las veces que queramos. Por ejemplo, si tenemos pensado comprar online por estas fechas, podremos activar las compras online con la tarjeta, pero si no compramos habitualmente a través de Internet, podremos bloquearlas hasta la próxima vez que queramos realizar una adquisición online.

Además, otra recomendación pasa por tener una tarjeta secundaria únicamente para comprar online. Por ejemplo, una tarjeta de débito asociada a una cuenta corriente nueva, o bien una tarjeta de prepago que no esté vinculada a ninguna cuenta y que podremos cargar y descargar al momento desde la app, sin necesidad de transferencias.

"La ventaja de aplicar este método es que podremos introducir únicamente el dinero que queremos utilizar para una compra online determinada. Además, en el caso de que hubiese una brecha de seguridad, no podrían acceder a la cuenta donde tenemos la nómina o el grueso de nuestro dinero”, asegura Battioli.

Además, “utilizar una tarjeta únicamente para realizar compras online es una buena idea, ya que requiere el esfuerzo adicional por nuestra parte de realizar el traspaso del dinero que queremos utilizar, lo que evita compras compulsivas, y lo separa del grueso de nuestro dinero, un resguardo más si hubiese una brecha de seguridad en la web donde compramos.”

En definitiva, la forma de configurar nuestras tarjetas dependerá del uso que hagamos de ellas: "Todo es cuestión de dedicarle unos minutos a revisar qué opciones permite nuestro banco. Por ejemplo, si tenemos una tarjeta únicamente para comprar online, limitar su uso en el extranjero o sacar dinero en cajeros será interesante. En cambio, si tenemos una tarjeta todoterreno, es mejor limitar las cantidades antes que restringir las operativas, por ejemplo, hasta 100 euros por comprar online, e ir aumentándolas a medida que pase el mes y necesitemos más”.