La oposición portuguesa condiciona el presupuesto anticrisis de Sócrates

AGENCIA EFE 20/10/2010 17:42

El líder del Partido Social Demócrata (PSD, centro derecha), Pedro Passos Coelho, anunció hoy las condiciones que exige su partido para no vetar los presupuestos en el Parlamento, el próximo 2 de noviembre, en una dura declaración en la que acusó al primer ministro José Sócrates de "desorientación e incompetencia".

Las principales exigencias consisten en una reducción del aumento previsto del IVA y los impuestos de la renta, la fiscalización "independiente" del gasto del Estado y la suspensión de grandes proyectos de inversión, que podrían afectar al futuro aeropuerto de Lisboa o el tren de alta velocidad a España.

El dirigente conservador luso dijo que el "responsable" de generar en los últimos años el mayor desempleo, déficit y deuda de la historia de Portugal es el Gobierno socialista y no una crisis internacional que sólo "reveló" los problemas existentes.

Además acusó al Ejecutivo de ocultar la realidad y "engañar" al país con tres planes de ajuste sucesivos aprobados este año, que no han conseguido frenar el gasto ni el "descontrol" del Estado pero han multiplicado la presión fiscal sobre las empresas y la población y le han quitado beneficios sociales "como nunca".

Pese a subir todos los impuestos, congelar salarios, reducir las plantillas de la Administración y subsidios como el de las familias y las medicinas "el Estado se endeuda día a día", denunció, solo para financiar su gasto corriente.

"El presupuesto es una sucesión de errores graves y el PSD no puede apoyarlo", subrayó el dirigente conservador, para quien el documento es "irreal" en sus objetivos y previsiones económicas, aumenta la carga fiscal y "crea condiciones para entrar de nuevo en recesión".

Según Passos Coelho, el Gobierno demuestra también "insensibilidad social" al cargar el peso de la crisis sobre los pensionistas y la clase media por no haber reformado el Estado y haber gobernado con "electoralismo".

El PSD no acepta la imposición de ese "mal" presupuesto de 2011 que pretende Sócrates porque no conseguiría controlar el gasto público y exigiría nuevos sacrificios en un "circulo vicioso".

Passos Coelho calificó sus condiciones como el "último" esfuerzo del principal partido de la oposición para concertar la salida a la crisis y no vetar el presupuesto del Estado, pero subrayó que el Gobierno "debe dar garantías" de que cumplirá sus compromisos.

Aunque no detalló las exigencias y aclaró que no se trata de una imposición de "todo o nada" el líder conservador enumeró cuatro condiciones generales para abstenerse y permitir que gane la votación de los presupuestos el Gobierno socialista, que perdió la mayoría absoluta en las elecciones del año pasado.

Las tres primeras condiciones son asegurar la transparencia de las cuentas públicas con una fiscalización independiente, hacer que el Estado asuma más sacrificios reduciendo sus gastos y limitar la subida de impuestos a los ciudadanos, incluido el IVA, que el Gobierno quiere elevar del 21 al 23% en 2011.

La última exigencia consiste en impedir endeudamientos adicionales con "grandes proyectos público-privados que supondrán más cargas para las generaciones futuras", una alusión a las inversiones a las que se ha opuesto de forma reiterada el PSD para acometer obras como el aeropuerto de la capital lusa o el tren de alta velocidad que la unirá en 2013 con Madrid.

"El primer ministro debe ahora decidir si quiere dar señales de responsabilidad o seguir su huida hacia adelante", concluyó Passos Coelho.

Sócrates expresó hace unas semana su disposición a dialogar con la oposición para conseguir la aprobación de los presupuestos de 2011, que considera indispensables para tranquilizar a los mercados y cumplir las exigencias de Bruselas de reducir el déficit público luso.