La derogación del artículo 52.d del Estatuto de los Trabajadores que permite el despido de un trabajador por bajas médicas cortas "no es un asunto negociable". Así de contundente se mostró la ministra de Trabajo y Economía Social, Yolanda Díaz.
"Cuando hay vulneración de derechos fundamentales no se puede negociar nada", ha subrayado la ministra un día después de la aprobación de la subida del salario mínimo interprofesional a 950 euros.
La ministra de Trabajo, que viene de las filas de Podemos, ha asegurado que los agentes sociales ya conocen esta decisión de anular este artículo, derivado de la reforma laboral de 2012, impulsado por el Gobierno de Mariano Rajoy. Se hará mediante Real Decreto Ley que anulará este artículo y que ya está listo, pendiente solo de la rápida aprobación del Consejo de Ministros.
Yolanda Díaz, entrevistada en RNE, ha explicado que trabajará desde el diálogo social, aunque ha señalado que es consciente de que en algunos momentos el debate se cerrará sin acuerdo.
No ha sido el caso del salario mínimo interprofesional (SMI), que subirá este año, con efectos retroactivos desde el 1 de enero, a 950 euros mensuales después de que Gobierno, sindicatos y empresarios alcanzaran ayer un acuerdo para elevarlo un 5,5% respecto a la cifra de 2019 (900 euros mensuales).
Díaz ha destacado que este acuerdo ha sido "un éxito del Gobierno de España", no de Unidas Podemos, porque en el Ejecutivo, ha dicho, "no hay camisetas" de según el partido al que se pertenezca. "Somos un equipo", ha subrayado la ministra, que también ha agradecido a los agentes sociales que hayan cedido en sus posiciones para lograr el acuerdo.
El compromiso del Gobierno es situar el SMI en el 60% del salario medio, un objetivo al que no va a renunciar y con el que se daría cumplimiento a la Carta Social Europea.