El expresidente del BBVA, Francisco González, investigado por los presuntos pagos de la entidad financiera al comisario jubilado José Manuel Villarejo para espiar a los politicos ha defendido su actuación.
"Una vez que termine esta investigación quedará muy claro que el Grupo BBVA y sus directivos han trabajado siempre de una manera íntegra y de una manera ejemplar, sin perjuicio, como es lógico, de que hubiera alguna conducta irregular de carácter individual que yo en este momento desconozco", ha asegurado a su salida de la Audiencia Nacional.
El exbanquero jubilado ha defendido la integridad de la entidad y de sus directivos este lunes tras declarar durante algo más de dos horas y media ante el juez de la Audiencia Nacional Manuel García Castellón y los representantes de la Fiscalía Anticorrupción investigado por presuntos delitos de cohecho y revelación de secretos por los contratos de la entidad con el Grupo Cenyt, propiedad del expolicía José Manuel Villarejo, ahora en prisión.
Francisco González, uno de los banqueros más influyentes de los últimos años, ha explicado que respondió "con toda transparencia y toda claridad" al instructor y al Ministerio Público, en línea con la posición que ya manifestó en un comunicado público el pasado mes de julio, cuando anunció que estaba "máximamente interesado" en declarar.
"En mayo de 2018 tuvimos conocimiento de que la empresa" del comisario Villarejo "había prestado algunos servicios al Grupo BBVA". Inmediatamente abrimos una investigación para determinar el alcance de dichos trabajos. Posteriormente, se abrió una pieza judicial", ha relatado ante la prensa.
Asimismo, ha defendido que el BBVA "es una gran institución internacional enormemente respetada que trabaja en beneficio de clientes y accionistas" y "también presta servicios relevantes a la sociedad".