Ha vuelto a ocurrir. Un nuevo fallo de seguridad en Facebook permitió que adultos sin autorización chateasen con niños en el Facebook Messenger Kids. Menores de doce años han podido entablar conversación con desconocidos. Y eso que la red social garantizaba la fiabilidad del chat, asegurando que solo personas del entorno del menor con la correspondiente autorización parental podrían comunicarse en el chat.
La compañía de Silicon Valley ha certificado al portal The Verge el fallo y ha enviado mensajes como este a miles de padres:
Facebook, además asegura que han desactivado "los chats afectados y proporcionamos a los padres recursos adicionales sobre Messenger Kids y seguridad online". Controlar la seguridad de los chat se convirtió en una tarea cada vez más compleja, sobre todo a medida que los chats crecían en tamaño y había que incrementar el número de autorizaciones. Muchos detractores habían alertado del peligro y pedido el cierre del Facebook. Además de hablar, a través del chat se pueden intercambiar fotos o vídeos.
La compañía tiene otros frentes abiertos. Sigue pendiente el caso de Cambridge Analytica, por la venta a esta empresa de los datos de 50 millones de usuarios de la red social. Esta misma semana, la Comisión Federal de Comercio de Estados Unidos podría dar a conocer su veredicto sobre el caso y algunos medios aventuran multas de más de cuatro mil millones de euros. Se cuestiona de Facebook no solo su falta de credibilidad. La compañía acaba de llevar a dique seco su proyecto de moneda virtual, la denominada Libra por las dudas que despertaba en los supervisores bancarios.