Si estás en paro o quieres cambiar de trabajo y ya tienes una edad, no te rindas, el año pasado se hicieron más de 5 millones de contratos a mayores de 45 años. Eso sí, en este mercado laboral "líquido" que se abre paso, los métodos tradicionales no valen, hay que cambiar de perspectiva, y el verano es el mejor momento para ver las cosas desde otro ángulo. Hemos preguntado a los profesionales cómo puedes sacar el máximo partido a la inspiración de la playita para mejorar tu vida laboral.

Se dice que no hay viento favorable para quien no sabe dónde va. Por ello, para la experta en recursos humanos Victoria Redondo, "lo primero es fijar el rumbo y crear una lista de empleabilidad". Empieza pensando aquello que no quieres ser, para buscar lo que quieres ser. Piensa en lo que estás haciendo ahora que no te gusta: el jefe, el trabajo en sí, el horario, el lugar... y escríbelo en una lista.

Luego piensa en aquello que te gustaría hacer, a lo que dedicar los próximos años, y añade horarios, ubicación, jefe, salario... y escríbelo también en la lista. Una vez terminada la lista, déjala reposar una semana o dos. Luego vuelve a ella cada pocos días y complétala, añade cosas, elimina otras, trabájala, profundiza en los puntos que veas más posibles y olvida lo imposible. Cuando la lista esté depurada, concreta actuaciones. Para Victoria "lo bueno de estas listas es que ponen en marcha el mecanismo de la acción que se necesita para mejorar tu empleabilidad".

No vale con que controles Excell, Power Point y leas los mails en el móvil. Hay que actualizarse, porque las herramientas digitales cambian cada día. Según el Marco Europeo de Competencia Digital hay cinco áreas que debes controlar y 21 competencias digitales que tienes que tener para ser contratado.

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Tener empleo no asegura que te contraten si lo pierdes, mientras que tener empleabilidad sí asegura tener empleo. Para Victoria Redondo "hay que dejar de percibir la generación de empleo como algo corporativo que nace desde la empresa, y pasar a pensar en nosotros como profesionales generadores de nuestro propio trabajo asociado a proyectos. Es como crear una segunda profesión". Esto no tiene nada que ver con el pluriempleo, es un concepto asociado a nuestras pasiones e intereses, desarrollan habilidades, mejoran competencias, nos hacen más flexibles y, en ocasiones, derivan en una reinvención profesional.

Si eres de los que cambian menos de currículum que de coche, vas mal. Y no lo actualices, tira ese word o ese pdf de hace años y haz uno nuevo. Si es interactivo, digital, con imágenes en movimiento o video, mejor. Hay plantillas de todo tipo que te ayudan. Y en cuento al concepto intenta construir una historia profesional, deja claro el puesto que buscas y de dónde partes. Ordénalo bien. En el apartado de formación pon primero lo último que hayas hecho. Que se vean bien los éxitos, los logros y las mejoras conseguidas de forma cuantificable a ser posible. Y da toda la importancia a aquello que buscas, véndete bien, si quieres trabajar es porque te hace feliz y por eso eres el mejor candidato.

Tom Peters, un gurú de las relaciones laborales, decía que "hoy, en la Era del Individuo, debes ser tu propia marca". Para conseguirlo planteaba 5 preguntas que debemos responder:

Si quieres saber más sobre construcción de marca personal puedes leer su libro 50 Claves para hacer de Usted una Marca.

Tu presencia en redes sociales es consultada, y valorada, por la gente que te vaya a contratar. Tu curriculum social aumenta tu empleabilidad si tu huella digital es profesional y mantienes una actitud activa. "Los reclutadores te buscan como profesional y valoran cómo te relacionas, cómo te comunicas y qué relaciones estableces, ayudarles a que te elijan tanto si buscas empleo cómo si lo que quieres es promocionar dentro de tu empresa", explica Verónica Redondo.

Cada minuto se contratan a 6 personas a través de Linkedin. No es el único filtro que deberás pasar en un proceso de selección, pero casi siempre es el primero. Por ello es preciso que tu perfil en esta red cumpla con unos requisitos que puedes mejorar poco a poco.

Estas claves pueden ayudarte a mejorar tu empleabilidad. "Es posible encontrar trabajo a cualquier edad, explica la experta en recursos humanos Verónica Redondo, "la diferencia entre éxito y fracaso está en la queja. Si eliges eliminarla, decidir y solucionar los problemas, ocuparte en vez de preocuparte, responsabilizarte de la situación y actuar, en definitiva, tomar las riendas de su vida y huir del victimismo, empezarás a sumar. A menos queja, más éxito", concluye.