La condena de las black a Rato, la primera de un largo futuro judicial
El registro en las oficinas de Rodrigo Rato marcó el descenso a los infiernos del ex vicepresidente del Gobierno. Se trataba de una investigación, sobre el origen de su patrimonio, que aún sigue abierta. Aunque, de momento, son las tarjetas black, las que le condenan a prisión. Sesenta y cinco ex directivos de Caja Madrid y Bankia han sido condenados por la Audiencia Nacional. Se gastaron 12 millones de euros. La pena más alta es para Rodigo Rato con cuatro años y medio de cárcel. Miguel Blesa fue condenado a seis años de prisión, pero su condena penal se extinguió tras su fallecimiento. Durante el juicio casi todos defendieron que la tarjeta era para gastos personales, pero la juez sentenció que hubo un delito continuado de apropiación indebida. Se gastaron el dinero en cosas personales. En el caso de Rodrigo Rato fueron 99.000 euros entre bebidas alcohólicas, lámparas de diseño, bolsos de lujo y mucho dinero en metálico. A la condena por las tarjetas black, Rato tiene que sumar la causa que sigue abierta sobre su patrimonio y el juicio por la salida a bolsa de Bankia que arrancará en noviembre.