Desafortunadamente, el salario bruto anual que negociamos con nuestro empleador suele estar lejos del salario que realmente percibimos cada mes. Distintos conceptos, entre ellos el Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas o IRPF, van rebajando esta suma hasta dejarnos con el llamado salario neto, que es la cuantía que recibimos en nuestra cuenta una vez restadas todas estas partidas. ¿Cómo calcular la retención de tu nómina para saber cuánto percibirás realmente?
Calcular la retención de tu nómina pasa por comprender sus conceptos y las sumas que se descuentan de tu salario bruto. En este sentido, existen determinados áreas de tu nómina que te interesa especialmente conocer, teniendo en cuenta que este documento existe precisamente para reflejar el cálculo de la cantidad que cobra cada trabajador. Además, no está de más recordar que es obligatorio que tu empresa te haga llegar tu nómina cada mes, y que ésta debe contener cierta información mínima.
Por ejemplo, es importante que seas consciente de cuál es tu categoría profesional, así como tu antigüedad en la empresa y tu tipo de contrato, ya que estos conceptos pueden influir en tu salario. También debes examinar el área de devengos o ingresos. En ella se reflejarán tus devengos salariales (cantidades que se entregan al trabajo como fruto de su desempeño, como el salario base, complementos salariales, horas extra, pagas extra, mejoras voluntarias, salario en especie...) y no salariales (percepciones que no cotizan a la Seguridad Social, normalmente gastos ocasionados en el desarrollo del trabajo como dietas, kilometraje o pluses de transporte). La suma de las percepciones salariales y no salariales será el total devengado de una nómina, o salario bruto del trabajador.
Pero quizás el punto más importante para calcular la retención de tu nómina es analizar el área de deducciones, tanto por IRPF como a la Seguridad Social. En el caso de las deducciones por IRPF, es importante conocer cuánto estamos aportando por este concepto porque de esta suma dependerá que la declaración de la renta nos salga a devolver o a pagar.
Lo normal es que tu empresa retenga en función de lo que corresponda teniendo en cuenta tu salario anual, para que tu declaración salga ‘en tablas’, pero si percibes otros ingresos o si has entrado a trabajar en tu empresa a mitad de año, deberás vigilar que no se te esté reteniendo por debajo de lo necesario.
Además, en el caso de las deducciones a la Seguridad Social, existen varias partidas:
El resultado de restar las deducciones al salario bruto será lo que llamamos salario neto, que es la cantidad íntegra que recibe realmente el trabajador.