No obstante, esta subida del AVE no afecta al nuevo Madrid-Valencia que se puso en servicio comercial el pasado 19 de diciembre, dado que su precio ya incluye la prevista actualización.
De su lado, AVE Medida-Distancia (el servicio de lanzaderas denominadas Avant) será el que registrará el mayor incremento, un 4,8%.
En fuentes de Renfe destacaron que este último aumento corresponde a los billetes individuales, dado que los abonos para realizar varios viajes en Media Distancia, tanto AVE como convencional, subirán un 2,3%, con el fin de primar la fidelidad de los viajeros, según indicaron a Europa Press en fuentes de la operadora.
Así, con la excepción de estos trenes, el resto de los servicios de viajeros de Renfe experimentarán en 2011 una subida inferior a la que se aplicó en 2010, cuando el servicio de Cercanías se encareció un 6%, el de Media Distancia un 5% y todos los AVE (tanto Larga Distancia como Avant), un 4%. No obstante, se trata de aumentos iguales o superiores a los de la inflación que, a cierre del pasado mes de noviembre, se situaba en un 2,3% interanual.
Dos tipos de tarifas
Renfe cuenta con capacidad para fijar las tarifas de AVE y Larga Distancia, por tratarse de precios comerciales y de un transporte para el que puede recibir subvención pública y que compite con otros modos de transporte. En el caso de Cercanías y Media Distancia convencionales, la operadora realiza una propuesta de revisión de precios que posteriormente debe someter al 'visto bueno' del Gobierno, a través de la Comisión Delegada para Asuntos Económicos.
Ello se debe a que son servicios considerados de "interés público", que además pueden recibir aportación estatal para cubrir el déficit de explotación que muchos de ellos registran. La compañía ferroviaria cuenta no obstante con distintas tarifas promocionales que permiten adquirir billetes con antelación con descuentos de entre el 40% y el 60% respecto a su precio original.
Según el Instituto Nacional de Estadística (INE), a cierre del pasado mes de octubre (últimos datos disponibles) los trenes de Renfe habían transportado 52,03 millones de viajeros, un 2% menos que en el mismo periodo de 2009. De ellos, unos 47 millones corresponden a los usuarios de Cercanías, otros 2,95 millones a pasajeros de Medias Distancias y los 1,90 millones restantes, al AVE y el resto de trenes de Larga Distancia.