Las ventajas y desventajas de jubilarse a los 67 años

El año nuevo trae consigo más novedades en la edad jubilación, y no será el último año, pues todo ello se engloba en el plan del gobierno para sostener el sistema, aumentando la edad de jubilación para que a partir de 2027 esta llegue a los 67 años como edad ordinaria. En 2025, los trabajadores que se quieran retirar de mercado de trabajo con el 100% de la tendrán que esperar a los 65 años para quienes hayan cotizado 38 y tres meses y de 66 años y ocho meses para quienes hayan cotizado por debajo.

Y aunque muchos son los que sueñan con la jubilación casi desde el momento en el que entran en el mundo laboral, otros se plantean seguir trabajando gracias a la jubilación demorada. La Seguridad Social ofrece esta posibilidad, con la que, además de seguir en activo, se mejora la pensión en un 4 % por cada año que se continúe trabajando o bien cobrar de golpe esa cantidad al jubilarse. También es factible cotizar un año más para luego pasar a percibir el 50 % de la pensión y seguir trabajando en el sector privado a tiempo completo o parcial, por cuenta ajena o propia y sea cual sea la retribución percibida.

Muchos trabajadores se plantean seguir trabajando o jubilarse y se encuentran en la tesitura de no saber qué es lo mejor para ellos.  Las ventajas y los inconvenientes de jubilarse están muy relacionados con cada persona y con la satisfacción con el trabajo. 

Ventajas de la jubilación

  • Cobrar sin trabajar. Tener una paga mensual fija todos los meses es lo más valorado entre los jubilados, sobre todo para aquellos que han tenido una vida de incertidumbre como autónomos sin vacaciones pagadas, con el implacable vencimiento de su cuota a la Seguridad Social y sin pagas extras.
  • Descuentos. Ser jubilado implica contar con descuentos en en transportes, viajes, cines, teatros, museos, para hacer deporte o incluso para estudiar 
  • Más tiempo libre. No tener que ir a trabajar e invertir 8 horas en ello, supone que se puede disfrutar de todo el tiempo para hacer lo que uno quiera, es uno de los principales atractivos de la jubilación.
  • Tiempo para hobbies. Cuando trabajamos debemos dejar de lado muchas aficiones, no por falta de ganas, sino por falta de tiempo. Tener todo el día para dedicarse a uno mismo supone recuperar aficiones como el tenis, yoga… o incluso aprender algo nuevo con lo que se llevaba años soñando. 
  • Vida familiar de calidad. Las parejas que han echado de menos disfrutar de sus hobbies o actividades pueden ahora tener tiempo para estar juntos, para ver a los hijos o pasar más tiempo con los nietos.
  • Cambiar de sitio en el que vivir. Mucha gente reside en una ciudad por motivos laborales Al jubilarse uno puede cambiar de residencia y buscar ese lugar con el que ha estado soñando años, o incluso irse a otro país, ya que la pensión se sigue cobrando, aunque vivamos en el extranjero.
  • Viajar en cualquier momento. Otra de las ventajas es que se acabó el tener que ir de vacaciones cuando todo el mundo lo hace. Cuando uno está jubilado puede viajar en cualquier época del año a cualquier sitio, y con mejores precios. 
  • Más saludable. Cuando uno se jubila su estado de salud mejora, además de disminuir el estrés y la depresión, el estilo de vida pasa a ser más saludable y, al tener más tiempo libre, es más fácil hacer ejercicio regularmente. 

Inconvenientes de la jubilación

  • Menos ingresos. Este suele ser uno de los mayores problemas de los jubilados. Además, muchos se enfrentan dudas sobre si podrán adaptarse a la reducción de ingresos. 
  • Aislamiento. La mayoría de las relaciones sociales suelen nacer del ámbito profesional, relaciones que se irán distanciando a medida que la jubilación siga su curso en el tiempo. 
  • Pérdida del estatus social. Cuando se está en activo es posible tener ciertas ventajas y prestigio por ser médico, periodista, profesor... Después, aunque el pasado haya sido glorioso, uno se convierte en “jubilado”, algo que puede afectar directamente a la salud mental. 
  • Vida familiar conflictiva. Para muchas personas la jubilación se convierte en un tormento porque pasan a estar disponibles para la familia y esta no siempre respeta su libertad ni sus gustos. Si no se gestiona bien, puede suponer una fuente de conflicto en la familia. 
  • Demasiado tiempo libre. Hay personas que se han involucrado tanto en su trabajo, o que han hecho de él su total forma de vida, que cuando dejan de trabajar no saben qué hacer y acaban por no saber gestionar su tiempo libre
  • Salud resentida. Al jubilarse, se incurre también en prácticas poco recomendables, principalmente el sedentarismo, además de comer más y a deshoras también puede provocar síntomas depresivos acompañados de una mayor ingesta de alcohol y tabaco.

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