Con la proximidad del 31 de diciembre, se presenta una oportunidad importante si queremos sacar el máximo partido y optimizar nuestra próxima declaración de la renta y reducir la carga fiscal correspondiente al ejercicio 2024 que esta finalizando. Por suerte hay un puñado de estrategias la mar de efectivas que puedes aplicar antes de finalizar el año para maximizar los beneficios fiscales.

Aportaciones a planes de pensiones

Realizar aportaciones a planes de pensiones es una de las estrategias más tradicionales y efectivas para disminuir la base imponible del IRPF. Las contribuciones realizadas antes del 31 de diciembre permiten deducir hasta un máximo de 1.500 euros en planes individuales y 8.500 euros en planes de empleo. Además, los autónomos pueden aportar hasta 4.250 euros en planes de empleo simplificados. Es importante considerar que estas aportaciones no deben exceder el 30% de la base imponible del contribuyente. 

Si el cónyuge obtiene rendimientos inferiores a 8.000 euros anuales, es posible realizar aportaciones a su plan de pensiones con un límite de 1.000 euros, lo que permite reducir la base imponible del aportante. Esta estrategia es útil para equilibrar las cargas fiscales entre ambos miembros de la pareja. 

Inversiones en empresas de nueva creación

Invertir en empresas de nueva o reciente creación ofrece una deducción del 50% sobre el capital invertido, con una base máxima de 100.000 euros. Esto implica una posible deducción de hasta 50.000 euros en la declaración de la renta. Para acceder a este beneficio, es necesario mantener la inversión durante al menos tres años. 

Donaciones a entidades benéficas

Las donaciones realizadas a organizaciones no gubernamentales (ONG) y fundaciones permiten deducir el 80% de los primeros 150 euros donados y un 35% del importe que exceda dicha cantidad. Si se ha donado a la misma entidad durante tres años consecutivos, el porcentaje de deducción sobre el exceso aumenta al 40%. 

Compensación de pérdidas y ganancias patrimoniales

Si durante el año se han obtenido ganancias patrimoniales por la venta de activos, es posible compensarlas con pérdidas generadas en otras operaciones. Esta estrategia permite reducir la base imponible del ahorro y, por ende, la carga fiscal. Es fundamental realizar estas operaciones antes de finalizar el año para que surtan efecto en la declaración correspondiente. 

Deducciones por inversión en vivienda habitual

Aunque la deducción por inversión en vivienda habitual fue eliminada en 2013, aquellos contribuyentes que adquirieron su vivienda antes de esa fecha pueden seguir beneficiándose de ella. Es posible deducir hasta el 15% de las cantidades invertidas, con un límite de 9.040 euros anuales. Realizar pagos adicionales antes de finalizar el año puede incrementar el importe a deducir. 

Mejora de la eficiencia energética en la vivienda

Las inversiones destinadas a mejorar la eficiencia energética de la vivienda habitual, como la instalación de sistemas de autoconsumo solar, pueden generar deducciones fiscales significativas. Estas deducciones pueden alcanzar hasta el 20% del importe invertido, con límites establecidos según la normativa vigente. 

Adquisición de vehículos eléctricos

La compra de vehículos eléctricos antes de finalizar el año puede dar derecho a deducciones fiscales. Además de las ayudas directas, existen incentivos fiscales que permiten reducir la base imponible en la declaración de la renta. Es recomendable consultar las condiciones específicas y los límites aplicables. 

Retribución en especie

Negociar con la empresa la percepción de parte del salario en especie, como tickets restaurante, seguros médicos o vales de transporte, puede reducir la base imponible del IRPF, ya que estos beneficios están exentos de tributación hasta ciertos límites. Es importante formalizar estos acuerdos antes de finalizar el año fiscal. 

Deducciones autonómicas

Además de las deducciones estatales, las comunidades autónomas ofrecen beneficios fiscales específicos. Por ejemplo, algunas regiones permiten deducir gastos en material escolar, guarderías o alquiler de vivienda. Es esencial revisar las deducciones disponibles en la comunidad autónoma de residencia y cumplir con los requisitos establecidos para cada una. 

La planificación fiscal es una herramienta poderosa para optimizar la carga tributaria. Aplicar alguna de estas estrategias antes del 31 de diciembre puede traducirse en un ahorro significativo cuando toque hacer la declaración de la renta. No obstante, es muy importante tener en cuenta las circunstancias personales en cada caso y, si existe alguna duda, consultar con un asesor fiscal para garantizar el cumplimiento de la normativa vigente y maximizar los beneficios fiscales disponibles.