Renta 2022: ¿qué regalos de boda se deben declarar?
Al ser donaciones, los regalos de una boda deberían ser declarados a Hacienda
La Agencia Tributaria puede enviar un requerimiento sobre los regalos de una boda incluso cuatro años después
Declaración Renta 2022: ¿Cuánto devolverá Hacienda y cuánto ingresará?
Inmersos en la campaña de la Renta 2022 que se prolongará hasta el próximo 30 de junio, a los contribuyentes les surgen numerosas dudas; y una de las más habituales es si se deben declarar los regalos de boda.
Habitualmente, cuando se contrae matrimonio –y se celebra–, los invitados suelen hacer regalos a los recién casados, que de ese modo ven aumentar su patrimonio, ya sea con dinero en efectivo, con transacciones bancarias o con regalos en especie. Por lo tanto, de acuerdo con la normativa vigente, deberán ser declarados en el IRPF o en el Impuesto sobre Sucesiones y Donaciones.
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Los regalos de boda deben declararse
Aunque no es una práctica habitual debido a que los regalos suelen ser de escasa cuantía –en términos financieros–, al tratarse de donaciones, los receptores de las mismas las deberían declarar en el Impuesto de Sucesiones y Donaciones. La cuantía que se queda el fisco depende de cada comunidad autónoma, ya que no en todas se paga el mismo porcentaje.
Sin embargo, precisamente por la variedad de los regalos de boda y porque las cantidades no son elevadas, no se suelen declarar. A fin de cuentas, las entidades bancarias solo deben informar a la Agencia Tributaria sobre transferencias superiores a 10.000 euros o ingresos en metálico que excedan los 3.000 euros.
Tipos de regalos
En cuanto a los regalos que se reciben en un enlace matrimonial, la mayoría de ellos son de tres tipos:
- Transferencias bancarias. Como hemos apuntado, cualquier transferencia se debe declarar, aunque Hacienda solo debe ser informada de aquellas que superan los 10.000 euros. No obstante, en caso de detectar un elevado número de transferencias, podría poner en marcha una investigación y, por lo tanto, solicitar al contribuyente que declarase el motivo de esos ingresos.
- Dinero en metálico. Aunque tiende a estar en desuso, el típico sobre con dinero en efectivo siempre está presente como regalo en una boda. Obviamente, las cantidades que se reciben mediante esta vía pasan inadvertidas para el fisco… hasta que se ingresan en el banco. Y es que, como hemos expuesto, los ingresos superiores a 3.000 euros son reportados a la Agencia Tributaria, especialmente si se realizan con billetes de 500 euros.
- Regalos en especie. El tercer modo de desear un feliz matrimonio es regalar algo material. Al igual que ocurre con los tipos anteriores, deberán ser declarados. Aunque bien es cierto que dependerá de la naturaleza del regalo. No es lo mismo una televisión que un coche o incluso un inmueble. Como cabe esperar, si una pareja recibe una vivienda o un automóvil, deberá declararlo en el Impuesto sobre Sucesiones y Donaciones y, en caso de dar beneficio (por ejemplo, un piso que ya está en alquiler), en la declaración de la renta.
Para finalizar, las personas que se han casado y han recibido presentes por su enlace, podrán recibir un requerimiento por parte de la Agencia Tributaria en los cuatro años siguientes a la boda. Por lo tanto, conviene tener localizado cualquier documento relacionado con la misma.