Se conoce poco que la industria automovilística es en España una de las más intensivas en la generación de energía fotovoltáica. Una implantación que se viene desarrollando desde hace más de 10 años en nuestro país. Sin embargo, el acelerador se ha pisado en los últimos tiempos entre otras cosas porque se han dado las condiciones necesarias para ello.
El caso es que para 2024, ya solo la suma de los proyectos conocidos de las principales plantas españolas de ensamblaje de vehículos (Seat, Ford, Stellantis...) supondrán más de 110 millones de vatios de energía renovable anuales, básicamente proporcionados por la instalación de paneles fotovoltáicos. Conozcamos los proyectos.
La última buena noticia nos la ha proporcionado Ford Almussafes. La marca del óvalo acaba de inaugurar en sus instalaciones valencianas un huerto fotovoltáico de 2,8 megavatios que ampliará en 2,2 MW en los próximos meses y que quiere incrementar hasta los 10 MW para 2024. Eso supone que ya es capaz de producir energía equivalente a las necesidades medias de 1.400 hogares y que este verano sumará la de 1.100 hogares más. Para comprender mejor esta capacidad diremos que una central nuclear actual genera de media 1.000 megavatios de modo constante y sin parar en las 24 horas del día. Una central térmica vendría a generar con un rendimiento óptimo unos cientos de MW anuales.
Más a más, desde el 1 de enero del año pasado toda la energía eléctrica que Ford consume en Almussafes procede de fuentes renovables. Pero esto es algo que ya sucede en todas las fábricas europeas de la marca del óvalo. Su meta es utilizar un 100% de electricidad libre de carbono en su fabricación mundial para 2035 y las dos zonas de paneles solares valencianas -en estudio implantaciones extra en los tejados de las instalaciones- le ayudarán indiscutiblemente a ello.
Pero hablando de generación de energía solar, la veterana fue la planta de Seat en Martorell. Planificó desde 2009 la instalación de su actual planta fotovoltáica que cuenta en la actualidad con 276.000 metros cuadrados, unos 40 campos de fútbol en paneles solares. En su momento fue la mayor instalación solar en planta de España y también se ha mantenido como la mayor de la industria automotriz europea. Sus 53.000 paneles solares generan unos 12 MW de potencia pico, que representa el 6% aproximado del total de la energía que necesita la fábrica. Por otro lado, el ahorro en CO2 es de unas 7.000 toneladas anuales.
Martorell tiene un acuerdo con Acciona para que la totalidad de su suministro eléctrico proceda de fuentes renovables.
La diversificación territorial de Stellantis hace que sus instalaciones solares también sean variadas. A mediados de 2021, Opel ya sacaba pecho con una instalación con la que cubre el 15% de las necesidades productivas de Figueruelas. Con 19.200 paneles en casi nueve hectáreas y una potencia de 8,6 megavatios.
La segunda fase aportará otros 15.600 módulos fotovoltáicos sobre 76.000 metros cuadrados para una potencia de 8,01 MW. El total de terreno cubierto será el correspondiente a 23 campos de fútbol para generar un total de 16,65 MW, casi un tercio de la energía anual consumida por la fábrica. No todo acaba ahí, ya que Figueruelas está envuelta en una nueva fase que aportará otros 14,15 MW de energía procedente de paneles que se instalarán hasta finales de este año en la zona norte de la fábrica. El “ahorro” de emisiones a la atmósfera es significativo, nada menos que 4.216 toneladas al año.
Pero aún hay más, ya que para finales de este año está previsto que Stellantis Zaragoza también instale dos aerogeneradores, es decir dos molinos de viento, de 5,7 MW de capacidad cada uno que serán acompañados a finales de 2024 por otros dos de 7 MW, para completar el cuarteto. Estas serán las primeras instalaciones eólicas de un fabricante de automóviles en España.
El resumen total es que toda esta generación de renovables supondrá un máximo de 30,8 MW de origen solar y 25,4 MW de origen eólico, lo que supondrá cubrir el 80% de las necesidades energéticas de la planta para 2024.
El mayor huerto solar de Madrid es también de un fabricante de coches, Stellantis, y está ubicado en los tejados de su fábrica de Villaverde. Realizado en dos fases, sus 15.000 módulos se extienden a lo largo de 30.000 metros cuadrados, para cubrir hasta el 30% de la energía utilizada en la planta, con una capacidad de 6,6 MW. Todo esto supone 2.546 toneladas menos de CO2 emitidas, un impacto similar al que tiene el Parque de El Retiro en la calidad del aire de la capital.
Si arriba hablábamos de la mayor instalación fotovoltáica en suelo, el parque de generación de la fábrica de Stellantis en Vigo será la mayor instalación de autoconsumo solar sobre cubierta de España.
Los de Balaídos instalarán 27.000 módulos en una superficie de 170.000 metros cuadrados que, volviendo a los campos de fútbol serían el equivalente a 24 de ellos. La instalación se realizará en dos fases de 15.000 y 12.000 paneles que generarán 14,2 y 9,5 GWh al año respectivamente, para un total de 18,78 MW. En autoconsumo eso significa abastecerse de un 14% de la energía eléctrica utilizada en los procesos de producción.
El comienzo de la primera fase está planificado para este mes de enero, con finalización a mitad de año. No obstante, y como en el caso de Almussafes, los gestores de la instalación ya han comenzado a estudiar una ampliación a prácticamente el 100% de la planta, con la intención de utilizar la energía generada no solo en autoconsumo, sino también otras posibles aplicaciones como la generación de hidrógeno e incluso el vertido y venta a la red eléctrica.
Y geotermia... pero en Alemania
La energía calorífica existente bajo la superficie terrestre es una de las posibilidades que estudia utilizar el Grupo Stellantis para la producción de electricidad, que como vemos es una de las compañías más activas en este ámbito.
Lo comentamos a modo de curiosidad, ya que al estar centrado en la fábrica alemana de Rüsselsheim se escapa de los ámbitos geográficos nacionales Stellantis ha anunciado su intención de producir electricidad limpia con estos recursos geotérmicos a partir de 2025 tanto para consumo interno como externo.
Las instalaciones de Landaben en Navarra del fabricante alemán fueron las primeras del sector de la automoción de nuestro país en conseguir la certificación de eficiencia energética EN 16001. Un reconocimiento que comenzó a gestarse ya en 1997 con la obtención de la primera certificación ambiental internacional ISO 14001 a una empresa automovilística en Europa.
Por otro lado, el presidente de VW Navarra Markus Haupt informó hace unos meses de la apuesta por la autogeneración de energía eléctrica. Se trata de un proyecto en el que el fabricante alemán está trabajando con el Gobierno de Navarra y que constará de dos fases, para las que se barajan distintas potencias instaladas de placas solares. La instalación de las placas se efectuaría en los techos de las instalaciones navarras.
Fue en 2012 cuando la marca francesa dio los primeros pasos para la puesta en marcha de una infraestructura de energía fotovoltáica en España. Una implantación que comenzó en los techos de las factorías de Valladolid y Palencia, pero también las marquesinas de los aparcamientos logísticos de ambas instalaciones para sumar más de 136.000 metros cuadrados en placas, lo que supone una potencia instalada superior a los 8 MW.
Además en 2021, la marca del rombo llegó a un acuerdo con Iberdrola para analizar de forma conjunta proyectos renovables en sus instalaciones (tanto de fotovoltáica como de eólica). Igualmente trabajarán en la reutilización de baterías de vehículos eléctricos para el almacenaje y posterior entrega de la energía recogida.
Uno de los hitos del tema que nos ocupa por su originalidad es el “árbol” fotovoltáico que instaló Iveco en su fábrica de Valladolid en 2018. Este generador se comporta como los girasoles, siguiendo la trayectoria del astro rey mediante un sistema de control astronómico. Esto permite que sus “hojas” estén siempre situadas en un ideal ángulo de 90 grados respecto a su fuente de energía. Por ello en su día esta estación en movimiento era capaz de generar un 40% más de energía que las placas estáticas, obteniendo un rendimiento de hasta 6.200 kilovatios al año.
Aunque su tamaño es reducido, tiene ventajas como estar totalmente automatizado y contar con funciones de autolimpieza y autoventilación, para minimizar dificultades en su rendimiento debido a la suciedad o a las altas temperaturas del estío pucelano.
No nos es posible repasar el gran número de fabricantes de componentes que también buscan la eficiencia energética y el cumplimiento con criterios ESG (ambientales, sociales y de gobierno) que suponen contar con renovables.
Pero sí daremos algunos ejemplos como el de Gestamp, una de las más avanzadas. Está trabajando en alcanzar el autoabastecimiento de sus 20 plantas españolas y 2 portuguesas hasta un total de 26,9 MW generados por paneles fotovoltáicos. Con ello, se evitará la emisión de 8.835 toneladas de CO2 a la atmósfera. Eso supone, según Gestamp, el equivalente a plantar 4.025 árboles.
Otro ejemplo es el Grupo Antolín, uno de los mayores fabricantes internacionales de interiores para coches, instaló ya en 2007 su primera instalación solar. Para 2020 ya contaba con 1,24 MW al año, el 33% del consumo energético de su sede central en Burgos. Además ha instalado placas en diversas de sus fábricas a nivel internacional.
También Bosch cuenta desde 2012 con placas en su sede central de Madrid, al igual que Michelin que desde 2010 cubre buena parte de sus necesidades diarias de energía en su planta de Valladolid con este método.