Siete consejos de andar por casa para ahorrar en la factura de gas y luz
Por cada grado adicional aumenta el consumo de energía en torno a un 7%: lo mejor, una temperatura entre 19 y 21 grados
Es recomendable no superar los 45ºC de la caldera, ya que, por cada grado que aumente, el consumo de gas se incrementará en la factura.
¿Cómo se traduce el ahorro de energía en tu factura de la luz?
ProntoPro.es, portal que reúne la oferta y la demanda de trabajo profesional, ha elaborado un estudio relacionado con los sistemas de calefacción que más se están demandando, siendo la instalación o reposición de calentadores de agua los que más solicitudes han recibido, con un 120% más respecto a 2021. Hay que tener en cuenta que los nuevos modelos pueden llegar a suponer un ahorro del 30% en la factura final.
Chimeneas de leña frente a las estufas de pellets
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Una opción para ahorrar energía y mantener climatizada la casa cuando llegan las bajas temperaturas del invierno es elegir una chimenea. Estas tienen un alto poder calorífico gracias a un combustible económico y sostenible como la leña y no necesitan enchufe. Por ello, su demanda ha aumentado un 20% en comparación con el año pasado ya que, al tratarse de un sistema de calefacción por biomasa, puede llegar a suponer un ahorro del 40% en los costes para calentar la casa.
Por otro lado, las solicitudes para instalar estufas de pellets han caído un 19,2% respecto a 2021 debido al aumento del precio de venta de este material que, a pesar de ser el más sostenible, se ha encarecido en el último año. Además, esta necesita de una toma de corriente a la que ir conectada para funcionar, por lo que incrementaría la factura de la luz. Más allá de elegir entre chimenea o estufa (la petición de las primeras ha aumentado un 20% de cara a este invierno), expertos inscritos en la plataforma de ProntoPro.es ofrecen una serie de recomendaciones para ayudar a reducir el consumo de energía en los hogares.
1. Temperatura óptima: Conseguir un ambiente confortable y evitar un gasto excesivo de electricidad es posible con una temperatura comprendida entre 19ºC y 21ºC; por cada grado adicional aumenta el consumo de energía en torno a un 7%. En España, como parte de las medidas de ahorro energético la calefacción no puede superar los 19ºC en lugares públicos.
2. Ajustar la temperatura de la caldera: Es recomendable no superar los 45ºC de la caldera, ya que, por cada grado que aumente, el consumo de gas se incrementará en la factura.
3. Contratar servicios de mantenimiento: Suele ocurrir que cuando surge una avería en la instalación de gas o toca realizar la revisión obligatoria de la caldera, no es el mejor momento económico. Para evitar sorpresas los expertos recomiendan contratar servicios de mantenimiento de la calefacción.
4. No bloquear la salida de los radiadores: Aunque el objetivo de los radiadores es eliminar el frío de la habitación, muchos aprovechan este dispositivo para calentar o secar la ropa. Es importante que no haya elementos que bloqueen la salida de calor de los radiadores.
5. Aprovechar el sol: El sol es la mayor fuente natural de calor que tenemos por lo que se recomienda aprovechar las horas más soleadas para subir las persianas y entre la mayor luz posible.
6. Aislamiento de puertas y ventanas: Antes de poner en marcha la calefacción, hay que asegurarse de que no haya ninguna vía por la que se pueda escapar el calor. Eso significa que todas las puertas y ventanas deben tener un buen sistema de aislamiento sin fisuras.
7. Poner los grifos en posición de agua fría: No siempre se necesita el agua caliente, pero al tener el grifo en esa posición el calentador se enciende automáticamente al abrirse. Incluso, si no se enciende durante mucho tiempo, cada vez que el calentador se pone en marcha, genera un consumo de gas. Si se colocan los grifos en la posición de agua fría, el calentador sólo se pondrá en marcha cuando realmente se necesite.