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El Subaru XV se vende en nuestro país desde 2018, pero ha recibido una actualización no sólo estética, sino también en su sistema de tracción que lo confirman como uno de los todocamino compactos más interesantes. Se trata de un modelo que cubrirá en gran manera nuestras expectativas si somos dados a las aventuras y nos gusta salir del asfalto en nuestras escapadas. Pero también si vivimos en zonas rurales o por razones de trabajo tenemos que recorrer travesías con difícil acceso, caminos de tierra o con asfaltos más rotos de lo habitual. Y tiene la etiqueta ECO para moverse sin problema por la ciudad.
- Sus medidas están en los 4,46 metros de largo por 1,80 m de ancho y 1,59 metros de alto. La distancia entre ejes es de 2,66 metros, una de las más grandes del segmento compacto. Cuenta con un espacio interior en su habitáculo muy generoso, sobre todo en las plazas delanteras. Atrás es ancho a la altura de los hombros, pero la plaza central cuenta con un gran túnel de transmisión en el suelo que obliga a separar bastante los pies, lo que haría su uso bastante incómodo a un hipotético quinto pasajero en viajes largos. Su maletero de 340 litros no es el más grande del segmento, pero es muy aprovechable al contar con unos volúmenes muy regulares. Eso sí, cuando bajamos la segunda fila de asientos, alcanza los 1.193 litros, una excelente cifra.
- Destaca en cuanto a capacidades ruteras fuera de la carretera. Destacan sus 22 centímetros de altura al suelo, la mayor cota de entre los modelos no premium de cualquier segmento. Sus 29 grados de ángulo de salida y su ángulo ventral de casi 22 grados son casi los mismos que todo un todoterreno especializado como el Jeep Wrangler. Se ve perjudicado por su alargado frontal, que hace que su ángulo de ataque sea de sólo 18 grados, cifra que a pesar de todo es mejor que la de bastantes todocamino actuales. Unas cotas todoterreno que suponen una de sus virtudes más características, diferenciándose así de sus rivales.
- El sistema motriz híbrido le ofrece una potencia conjunta de 150 caballos y un par motor de 194 nm. Está pensado para la reducción de consumos, es bastante suave y progresivo y permite una dosificación de la aceleración muy eficaz. Su velocidad máxima es de 193 km/h y tienen una aceleración de 0-100 km/h en 10,7 segundos. El motor eléctrico mueve el coche en algunas ocasiones, siempre a bajas velocidades y solo lo mantiene durante unos pocos cientos de metros. Es decir, no es un mero sistema de hibridación ligera. Este sistema le permite contar con la etiqueta ECO de la DGT.
- Las mejoras realizadas por Subaru en el XV se centran sobre todo en el sistema X-Drive. Este es un sistema electrónico, un control de tracción mejorado, que supone la principal ayuda que el vehículo nos ofrece cuando la superficie tiene poca adherencia. Cuenta con dos modos de conducción: Snow/Dirt para utilizarlo cuando la superficie se encuentra deslizante y cubierta bien con nieve o bien con gravilla o D.Snow/Mud cuando la nieve es profunda o atravesamos una zona de barro. Por otro lado, las versiones e-Boxer, que son aquellas que cuentan con una potencia de 150 CV como la que estamos analizando, también aporta mejoras en el sistema SI-Drive para cambiar la respuesta del motor y la transmisión de esa potencia según se elija uno u otro programa de conducción. Finalmente, si elegimos el modo Sport, la respuesta del motor es más rápida y contundente a las exigencias del acelerador.
- Cuenta con un motor térmico a gasolina de cilindros enfrentados en horizontal o “boxer”, una tecnología que también aplica Porsche en algunos de sus modelos térmicos. Se trata de un motor sin turbo o atmosférico de cuatro cilindros y 150 CV. Su volumen le permite ir situado más abajo que otros motores térmicos, lo que baja también su centro de gravedad, aportando mayor estabilidad y por tanto, favoreciendo la dinámica. Además, otorga un plus de seguridad pues en caso de colisión frontal, se “sumerge” bajo los asientos delanteros, eludiendo mejor la penetración en el habitáculo.
- La tracción es permanente a las cuatro ruedas, lo que tiene como resultado un ligero incremento en los consumos. La caja de cambios es automática de variador continuo, con un sistema que simula hasta siete velocidades manejadas mediante levas en el volante. Estas cajas CVT son algo más ruidosas que otros sistemas y algo menos directas en su comportamiento, pero ayudan a contener consumos. Subaru también ha cambiado los amortiguadores y los muelles para reducir los movimientos de la carrocería.
- El equipamiento de serie es amplio e incluye el sistema de seguridad preventiva EyeSight con doble cámara, más otra cámara de visión trasera. Respecto a este sistema EyeSight también hay novedades, ya que dispone en algunas versiones de una función que controla un área de nada menos que 180 grados delante del coche para reducir el riesgo de encontrar obstáculos inesperados. Otras ayudas son la de frenada de emergencia y al arranque en pendiente, aportando igualmente anclajes ISOFIX, llantas de aleación de 18 pulgadas, faros delanteros, traseros y antiniebla LED, siete airbags, retrovisores eléctricos plegables, sensor de lluvia, asientos delanteros calefactables, climatizador dual con ajuste por voz, compatibilidad con Apple CarPlay y Android Auto, pantalla central de 8 pulgadas, reconocimiento por voz Siri, Bluetooth y volante multifunción.
El Subaru XV Hybrid es un modelo que reúne características de los todoterreno con otras de los turismos para completar un coche muy versátil y difícil de encontrar en el mercado. Gran altura al suelo (22 cm.) sus sistema X-Drive con las ventajas tecnológicas que aporta este sistema de control de tracción en terrenos complicados, su sistema de ayuda al descenso en pendientes, un chasis muy capaz en terrenos difíciles... todo eso hace que muy pocos todocamino, y mucho menos entre los de tamaño compacto, puedan igualarse en capacidades camperas. Habiéndolo probado en invierno en nieve y en verano en caminos y roderas podemos contrastar estas afirmaciones de notable en el desempeño de capacidades fuera del asfalto. Por otro lado, la tracción total permanente no es solo esencial en estos desempeños camperos, sino que aporta un plus de seguridad en todo tipo de conducción incluyendo, por supuesto, la de asfalto.
Y lo mejor es que en carretera se trata de un coche dócil, fácil de conducir y muy agradable para realizar largos trayectos por carretera. Sus suspensiones, ahora mejoradas, son todavía más cómodas de lo que ya lo eran. Sin embargo, eso no quiere decir que se incrementen los balanceos, todo lo contrario, la firmeza de su chasis sigue imponiéndose y logra que el coche gire sin descomponerse.
En cuanto al espacio en el habitáculo, es abundante en este XV, posiblemente más abundante que en ningún modelo de su estilo en el mercado. Nos hubiera gustado un maletero algo más generoso.
La frenada es contundente, ya que la seguridad es uno de los apartados que cuida mucho Subaru, aportando discos ventilados en los dos ejes. Otro aspecto en el que siempre sobresale la marca en los estudios anuales es en durabilidad, situándose siempre entre los primeros puestos del escalafón.
En cuanto a su sistema híbrido, su función es principalmente la de mejorar sus consumos, aunque también sirve de apoyo en aceleraciones siempre que cuente con batería suficiente. La cifra oficial de consumo combinado es de 7,9 litros a los cien kilómetros. Nuestras cifras quedaron algo por encima aproximadamente un litro en consumo combinado.
El Subaru XV Hybrid tiene dos versiones. La básica o 2.0i Sport Plus que es la que hemos probado cuesta desde 32.550 €, según el configurador de la marca. Hay una versión mejor equipada que es la 2.0i Executive Plus que cuesta 35.550 €.
Este Subaru interesa a todas aquellas personas que viven, trabajan y disfrutan de la vida en el exterior, los deportes o los desplazamientos a zonas alejadas. Sus capacidades fuera de la carretera les harán disfrutar de esos momentos y salir sin dificultad de la mayoría de los obstáculos que caminos o vías rotas les pueden poner por delante. Además, su agrado de conducción en carreteras o autovías, y la etiqueta ECO de la DGT suponen un arsenal de ventajas que pocos modelos son capaces de reunir y en tantos momentos de conducción diferentes.
Esto hace que consideremos que si eres o quieres ser una de esas personas que buscan un coche versátil para la mayoría de condiciones de conducción, este Subaru XV pueda proporcionar muchas alegrías.