El duelo comenzó de la mejor manera para el manacorí, que ya en el primer juego logró romper el servicio de su rival, retuvo su servicio y casi le vuelve a quebrar en el tercer juego. Sin embargo, el serbio se repuso para recuperarlo con un 'break' en el cuarto tras un error no forzado de derecha de Nadal.
Después de dos juegos en los que cada uno solventó con un 40-0 su saque, el séptimo demostró que esta iba a ser una lucha entre dos fueras de serie, que fueron alargando los puntos hasta el infinito, con el serbio poniendo presión en el revés de Nadal.
El primer parcial, en el que tanto el español como el balcánico ofrecieron todo un repertorio de intercambios de golpes y de velocidad, dio un vuelco cuando 'Nole' fue capaz de firmar un nuevo quiebre la cuarta vez que restaba, algo que sirvió al número uno del mundo para llevarse la manga tras 43 minutos.
La igualdad caracterizó el segundo set, en el que hasta el séptimo juego los contendientes fueron defendiendo sus saques, con puntos largos. Un error de Nadal con la derecha concedió a Djokovic su tercer 'break' de la tarde, que refrendó su ventaja ganando después su saque.
El quiebre descentró por completo al balear. En el octavo juego y al resto, el serbio desaprovechó su primera bola de partido, pero no falló en la segunda, lo que le dio su pase, tras una hora y 38 minutos, a su final número 33 en Masters 1.000 y 75 de su carrera (51-23), en busca de su segundo título en la ciudad monegasca. Nadal, por su parte, se queda sin poder aspirar a su novena corona en Montecarlo.
De esta manera, Djokovic se medirá con el checo Tomas Berdych, que se impuso en la otra semifinal del torneo monegasco al francés Gaël Monfils en dos sets (6-1, 6-4). En su tercer intento -tras los de 2007, ante Nadal, y 2012, ante Djokovic- por llegar al último partido en Montecarlo, Berdych logró el objetivo al derrotar al francés Monfils en una hora y ocho minutos. Era, además, la tercera vez que el checo se medía este año con el galo en el circuito -después de los duelos en Róterda ...
Berdych, número ocho del mundo y sexto cabeza de serie del torneo monegasco, solo tuvo que emplear 24 minutos para llevarse el primer set, después de romper en dos ocasiones el servicio de su rival. Además de su firmeza con el servicio, presentando una velocidad media de 199 kilómetros por hora con su primer saque, se adjudicó el 78% de los puntos que afrontaba con este golpe.
La segunda manga se inició con tres quiebres consecutivos que dejaron a Berdych por delante (2-1). El checo mejoró su rendimiento en el servicio, ganando el 85% de sus primeros saques y concluyendo con 21 golpes ganadores para cerrar el set por 6-4.
De esta manera, Berdych peleará en Montecarlo por el segundo Masters 1.000 de su carrera, justo diez años después de que se estrenara en París-Bercy -en 2005, ante el bosnio Ivan Ljubicic-. Por otro lado, será la cuarta final de este nivel para el checo, habiendo perdido las de Miami 2010 -contra el estadounidense Andy Roddick- y el Mutua Madrid Open en 2012 -contra el suizo Roger Federer.