La carrera de Isco Alarcón ha cambiado de rumbo en solo unos meses. De no tener clara su continuidad en el Real Madrid y buscar una salida, a convertirse en la brújula del equipo blanco. Zidane confía en él. Su magia decide, como demostró su exhibición en la Supercopa de Europa contra el Manchester United. Por eso, el Madrid lo tiene claro: le renovará su contrato y le blindará como la estrella merengue que es.