El equipo de José Venancio López, que no tiene licencia para empatar por tener perdido el 'gol-average', volverá a recurrir a la savia nueva para sacar adelante el choque ante los ucranios. Miguelín y Aicardo dan buena cuenta de ello, goleadores en el debut ante Eslovenia, que se solventó con 4-2 y con más 'problemas' de los esperados.
España se sacudió los nervios y buscó afinarse en una cita en la que debe ir a más. El 3-6 endosado a Eslovenia permite a los jugadores de Lisenchuk obtener la primera posición del Grupo con un empate, por lo que el encuentro toma tintes de final.
Una victoria daría la oportunidad al combinado español de verse las caras con el segundo clasificado del Grupo A: Croacia, República Checa o Rumanía. Tras el juego demostrado en la segunda mitad del encuentro ante los eslovenos, España sabe cuál es el camino a seguir para asegurarse un cruce de cuartos de final con el segundo clasificado del Grupo A.
El principal peligro para España se llama Legchanov, cierre del conjunto ucraniano y que se ha destapado como el máximo goleador del campeonato, un jugador ante el cual el equipo nacional se verá reforzado con la presencia de Álvaro, recuperado de sus molestias, y que podría tener minutos en el partido.
El encuentro enfrentará por novena vez a las dos selecciones desde su primer partido en el Mundial de 1996. En todas ellas España ha conseguido imponerse a su rival, consiguiendo 29 tantos a favor y 6 en contra. La última vez que se vieron las caras fue en el Europeo de 2007, que acabó conquistando el conjunto español.