Grosjean, a los comisarios del circuito: "Gracias por salvarme la vida"
Grosjean ha abrazado al comisario que cruzó la pista con un extintor y le ha regalado una maqueta de su casco
El piloto francés de Fórmula 1 Romain Grosjean ha regresado al circuito de Baréin, en el que sufrió un aparatoso accidente durante la primera vuelta del Gran Premio del fin de semana pasado. Durante su visita, con las manos todavía vendadas a causa de las quemaduras, el corredor de Haas ha dado las gracias a los comisarios que le auxiliaron tras el choque y posterior incendio.
"Gracias por salvarme la vida", ha dicho dirigiéndose al comisario que cruzó la pista corriendo con un extintor cuando vio que no había salido de las llamas. "Tu reacción, tu actitud, vi el vídeo, tu conciencia de dónde estaba dentro del coche", ha reconocido después de darle un abrazo. Asimismo le ha regalado una maqueta de su casco a escala reducida.
MÁS
También ha mostrado su agradecimiento al resto de equipo del circuito, con especial atención los integrantes del coche médico, el piloto Alan van der Merwe y el doctor de la Federación Internacional de Automovilismo (FIA) Ian Roberts. Este último fue el encargado de comprobar el estado de salud del corredor después de que saliera del monoplaza conmocionado.
La de Baréin ha podido ser la última carrera dentro del Gran Circo para Grosjean, que termina contrato con Haas y no ha encontrado otro asiento para 2021. Su deseo es estar en la cita de Abu Dabi la próxima semana, la cual cerrará la actual temporada de la competición. No obstante ha puntualizado que dependerá de si la hinchazón de su mano izquierda ha bajado lo suficiente como para pilotar.
El incidente ocurrió durante la primera vuelta de la carrera. Después de salir de la tercera curva del trazado, Grosjean se desplazó a la derecha en plena recta y tocó con su rueda trasera derecha la delantera izquierda del piloto de Alpha Tauri Daniil Kvyat, al que no vio por el retrovisor. Inmediatamente después el monoplaza del francés salió disparado contra los guardarraíles situados a la derecha.
Como consecuencia del impacto, a más de 200 kilómetros por hora, atravesó las protecciones y el tanque de la gasolina sufrió una explosión, tras partirse en dos el fórmula 1. El francés permaneció dentro del fuego medio minuto, hasta que consiguió salir por su propio pie, con la visera derretida y quemaduras en ambas manos.